Por Mariana del Valle
Esta es la séptima de OFFF.MX. y es, probablemente, el único festival en México que celebra la creatividad en todas sus formas. Año con año su curaduría es capaz de ponernos la piel de gallina y , particularmente para los que trabajamos dentro de universos como el de la publicidad, siempre es un anhelo poder tallerear como lo hacen los ponentes.
Muestra una utopía que debería ser el objetivo de todos: esa mezcla de éxito y placer por el trabajo, ecuación que dentro de los despachos publicitarios mexicanos puede llegar a ser francamente imposible. La mayoría de los ponententes son directores creativos de sus compañías, despachos chiquitos o talleres independientes que trabajan con grandes marcas; pero que -sobre todo- son héroes de guerras de las ideas: clientes duros, ideas rotas, disrupciones, abrir brecha, equivocarse y ganar.
Para entender la identidad de OFFF hay que saber de dónde viene. Este festival oriundo de Barcelona ha sido dirigido desde su primera edición por uno de los grandes creativos digitales de este país: Josué Ibáñez. Recordado por el desarrollo de una instalación de luces y projection mapping brutal de proporciones épicas sin faltarle al respeto al uso de las escalas. Chichen Itza y Teotihuacan fueron sus lienzos de proyección, los escaparates “mounstro” cómo él les dice.
“Contribuir al desarrollo de la creatividad en México como potencia generadora de cultura digital, más que una disciplina, es la misión y por eso existe OFFF en México.”
Y asentimos con la cabeza. OFFF siempre ha sido referente de vanguardia y fue aquí donde se esuchó por primera vez acerca de Copy Left, la licencia que cambió la manera de entender la programación y que sositiene al software libre, Creative Commons, entre muchas otras iniciativas increíbles.
Va por la vida como si supiera qué sigue y de hecho así es:
“Mixed media, las experiencias inmersivas, que son de toda la vida, pero ya como un formato. La contribución de diferentes tecnologías que hacen que te sientas inmerso en espacios como la realidad virtual o la realidad aumentada, pero también apoyándote en elementos como el projection mapping. Estamos en un gran momento de transición, de mixed media. Hoy en día no hay universidades que te expliquen esto. Es cómo el cine, no hay una universidad para ser director de cine. Puedes estudiar cine, pero no puedes estudiar para ser buen director. El ritmo está cambiando constantemente, el año que viene esto ya evolucionó. El método, herramientas, tecnologías y formatos en su conjunto, son eso: las experiencias inmerisvas. La tendencia es la inmersión”.
Josué Ibáñez sostiene que el problema de la Inmersión es que no hay entendimiento del formato, sobre todo en un momento en el que existe la posibilidad de gestionar experiencias con sensores, celulares, etc. La clave está en cuestionarse para qué queremos todo eso, porque una cosa es tener los juguetes y otra es usarlos bien.
“Para el desarrollo de una buena experiencia siempre hay que pensar que queremos contar, y esa es la misión de OFFF: queremos que las personas se inspiren; pero sobre todo que entiendan, que todo buen trabajo cuenta con una narrativa.”
La gran ilustradora Yuko Shimizo se presentó el primer día y conetó durante su ponencia que hoy en día el ilustrador tiene que garantizar que todas ilustraciones no puedan ser fotografías. Llevar la ilustración al extremo y sentirte orgulloso de cada paso porque cada proyecto, por muy pequeño que sea, es relevante para ti y tu trabajo,
Presentó cosas espectaculares cómo portadas de revistas en las que ha trabajado, así como también se dio el tiempo de comentar procesos alrededor de marcas que fabrican desde pañales hasta experiencias gastronómicas.
También tuvimos presencia de Moment Factory, estudio enfocado en experiencias inmersivas que utiliza pantallas de gran formato como punto de partida y propone la gestión creativa a partir de la gente y de ubicar a la tribu que será parte activa de las piezas: cómo caminan, por dónde pasan, qué les gusta y al entender eso, meter el factor sopresa: MAGIA.
Roy y Arturo Ambriz de CINE FANTASMA se encuentran en la re una serie en stop motion que se ha catalogado como icónica, tierna y fantástica. Ellos mejor que nadie saben de las negativas gubernamentales en México al apoyo de la creatividad independiente y han convertido esos obstáculos en la punta de lanza para gestionar sus proyectos.
Es conmovedor cómo las grandes mentes siempre se topan con las piedras en casa. Es necesario explicar que las industrias creativas son indispensables para el desarrollo emocional y mental de las audiencias, no solo a este gobierno sino a todos los que sigan.
David Carlson, uno de los grandes tipógrafos de la historia del diseño gráfico moderno cerró el festival. Carlson, frecuente colaborador de David Bowie y NIN, enfocó su charla en el proceso creativo y nos demostró que la old school del papel juega en su propia liga. La retórica del diseño gráfico clásico es un bálsamo artístico. Carlson es muy claro en su técnica: la experimentación, la observación, la intuición y la libertad creativa son claves para desarrollar un sello personal, inigualable y original.
“Nadie puede copiar tu ojo y sensibilidad. Y eso nos vuelve intrigantes. ¿Cuál es el mensaje que quieres enviar? ¿Qué quieres comunicar?”.
Podrían escribirse cien páginas de la gente tan brillante que trabaja ahí, pero preferimos dejarle a la audiencia este pequeño resumen hecho para inspirar y así nos inspira OFFF, su creador y sus invitados.