// Por: Oscar Adame

jue 1 septiembre, 2022

“Realmente no sé cuál es mi cultura, es una mezcla extraña de muchas cosas”, me declaró Jack White en una llamada vía ZOOM, profundizando un poco en sus orígenes como un chico hiperactivo que creció en un vecindario mexicano de la ciudad de Detroit, “no en los suburbios, que es donde toda la gente blanca vive”.

Tal cómo ha hecho con la guitarra en sus más de treinta años como una de las leyendas más grandes que ha tenido la historia del instrumento; en una entrevista, la voz de Jack White salta de tópico a tópico en un movimiento enérgico, pero siempre firme. Como su música, su conversación llega a lugares inesperados, pero siempre siguiendo un camino que se siente totalmente natural. Nuestro encuentro nació debido al reciente lanzamiento de dos álbumes completamente opuestos, pero que se complementan entre sí: Fear Of The Dawn (2022) y el introspectivo Entering Heaven Alive (2022).

“Si le hubieras preguntado a Picasso cuál era su color favorito durante su periodo azul, te hubiera respondido que el azul, pero también te hubiera dicho algo distinto diez años después”, reflexionó, colocando la raíz más profunda de nuestra interacción: Una apuesta por la evolución. La evolución de la música, la evolución de los formatos, la evolución del consumo y la evolución de un hombre que se ha colocado en la cúspide de una larga lista de visionarios en torno a la industria discográfica.

Pese a que, durante su carrera, muchos escuchas y críticos han tratado de colocarlo en una cajita, definiéndolo por su éxito como el perfecto guitarrista de The White Stripes, si hay algo que Jack ha hecho en los últimos años es sorprender y salir de sus propias restricciones. De la pertenencia a proyectos que poco o nada tienen que ver con el minimalismo del dúo que le otorgó fama internacional, a su gestión como creador y director de Third Man Records, la compañía discográfica más extravagante, divertida e impactante del último siglo, Jack es lo que tu abuela describiría como “un estuche lleno de monerías”.

“La gente asumió que ese era quien iba a ser por el resto de mi vida y yo decía: -Noo, esta solo es una de las bandas en las cuales he estado, pero he formado más de quince proyectos distintos-. The White Stripes solo resultó ser aquella que a la gente le gustó”, declaró, agregando que en los últimos años ha modificado sus métodos de producción y composición musical. Cuando antes prefería usar carretes de cinta, ahora se encuentra, divertido, jugando con las posibilidades de ProTools para gestar las exorbitantes producciones de Boarding House Reach (2018) y Fear Of The Dawn (2022), dos de los álbumes de rock más propositivos, experimentales y complejos de las últimas décadas.

Es por esto por lo que se mantiene firme, diciendo que era “aquel chico que, si veía que todos compraban Adidas, yo iba a comprar Nikes solo para ser distinto. No quiero hacer lo mismo que hacen todos los demás”. Se nota, si hay algo que define a Jack White es su excentricidad, lo cual no es malo… sino único. Pese a ser un compositor de música rock tradicional, él siempre encuentra la forma de agregarle un distintivo a todo lo que hace. Tal como Picasso, cada una de sus etapas vienen centradas en una paleta distinta de color; pero, contrario al artista español, Jack planifica y desarrolla cada una de ellas con obsesión.

No son solo los colores de sus principales proyectos creativos: Rojo para The White Stripes, Amarillo para Third Man Records y Azul para su proyecto solista. También es el método, la visión, el colocarte reglas distintas en cada una de tus etapas para ver a dónde te pueden llevar, obligarte al cambio y divertirte porque “cuando no hay restricciones, no hay nada que romper”. Su éxito es la filosofía detrás de una de sus mayores obsesiones: El número tres, un acertijo con el cual ha desarrollado todos sus proyectos y que describe como “un símbolo del balance, el mínimo necesario para ser capaz de respirar, salir y hacer más con ello”.

Jack salió de un pueblo repleto de mexicanos, escuchando banda, mariachi, y cumbia, al mismo tiempo que se vio inmerso en el desarrollo de la popularidad de la música house, el rap y los primeros años del techno. Lo respetó todo, le gustaba, lo consumía sin queja, pero al mismo tiempo siempre se vio seducido por el sonido de una vieja guitarra, un par de amplificadores y el sentir de una buena canción de blues.

Y eso es debido a que, aunque él dice que no sabe cuál es su cultura, sí sabe qué es lo que le habla y esas son las raíces: “Te cambia la vida cuando escuchas blues y aprendes que muchos de sus instrumentos devienen del oeste africano y que fueron traídos al sur de los Estados Unidos. Cuando aprendes sobre estas cosas, te das cuente de que cualquier cultura de la cual seas… Hay un blues ahí. Hay un blues en la música folclórica de Irlanda y Escocia, hay un blues en Alemania, hay un blues en Estados Unidos, y también lo hay en México. La raíz de todo depende de qué tan lejos en el pasado quieras ir y, al final, todo está conectado en la misma raíz. Llámala como quieras llamarla, yo simplemente le digo -el blues-“.

Si hay un músico interesado en seguir pintando nuevas capas de colores en -el blues-, ese es Jack White. Él dice que la primera colección de Third Man Records fue el inicio de una nueva época para el vinilo, puesto que “no había capturado la imaginación de la gente hasta que nosotros integramos discos de color y ediciones limitadas”. Él fue el director de una nueva época para el formato porque se ha dedicado a exprimir todas sus posibilidades y esa es justo su importancia en el mundo de la música.

Como la última gran figura que ha logrado empujar los límites del rock y de la tradición de la guitarra estadounidense, hace sentido que una de sus piezas sea la más representativa de nuestra época. Pero, aunque ‘Seven Nation Army’ es coreada en estadios, bares, fiestas y protestas de todo el mundo, él aun no puede creer que haya gestado algo que las masas han proclamado como suyo y que se ha impreso en la cultura popular como un hito de impacto universal. Su trabajo es el último tramo de la raíz, la última canción que forma parte de aquel -blues- que nos conecta a todos.

“Es muy lindo entrar a una tienda de instrumentos musicales y escuchar que alguien está tocando ‘Seven Nation Army’ la primera vez que toma una guitarra. No hay nada más importante. Me quita el aliento, no puedo creerlo”. Cuando le pregunto si ese es su mayor logro, él simplemente contesta: “Definitivamente sería difícil de superar jajajajaja”.

La obsesiones de Jack The III

Hey Jack, es lindo conocerte. Cuando era adolescente, solía creer que Elephant (2003) era uno de los mejores álbumes de la historia… De hecho, lo sigo creyendo.

Ohh muchas gracias. Woahh.

Sé que estamos aquí porque lanzaste dos álbumes que se complementan entre sí. Es interesante porque creo que desde Boarding House Reach te has estado sintiendo mucho más libre que antes en el hecho de que estás experimentando mucho más con las estructuras, rompiendo reglas de la tradición de la música rock.  

Sí, así es. Siento que fue un buen momento para mí cuando lancé Boarding House Reach (2018) porque fue un periodo en el que… Creo que hay muchas canciones que he tenido a lo largo de mi carrera que la gente no conoce muy bien y esto hace que la gente no conozca un lado importante de mí porque realmente nunca las puse todas juntas en forma de un álbum.

Así que esta fue la primera ocasión en la cual la gente reaccionó diciendo: -Ohh, woow, este tipo tiene mucha música que es bastante rara-. Fue divertido porque creí que las personas ya sabían eso con respecto a mí, pero aprendí en ese periodo que no era así. No lo sabían.

En el proceso de componer ese álbum me di cuenta de que no sería para todos. Algunos en el mainstreamestarían interesados en él, pero era evidente que sobretodo la gente que no está interesada en ese mundo recibiría algo más profundo de él.

Lo que me dices es bueno porque me abrí a muchas técnicas de edición en ProTools y en computadoras que siempre ignoré o que traté de hacer en cinta. Pero, en esta ocasión era imposible hacerlo en cinta. Simplemente no podía hacerse, no hay forma en que las canciones en Fear Of The Dawn (2022) o Boarding House Reach (2018) pudieran editarse en cinta, sería enloquecidamente complicado. Necesitarías como seis máquinas distintas y un montón de paciencia para lograrlo.

Admiro mucho la habilidad de editar en computadora porque me ha dado la posibilidad de llegar a sitios distintos en los cuales puedo ser creativo en nuevas formas… Es casi como si me hubiera quitado las restricciones que me establecí antes y otorgado nuevas. Eso me gustó mucho, hay cosas muy interesantes con las cuales jugar.

Leí una entrevista previa a estos álbumes en la cual dices que te gusta mucho grabar y producir en cinta porque te permite no tener que tomar muchas decisiones. Solo tienes la posibilidad de tener un par de tomas y eso es todo. Me gustaría saber si esta apertura a nuevas tecnologías te ha llevado a romper esa regla que tenías…

Sí, en muchas formas. Aunque, pensándolo de forma distinta, creo que algunas de las cosas que dije hace veinte años… Si le hubieras preguntado a Picasso durante su periodo azul cuál era su color favorito, te hubiera dicho que el azul, pero también te hubiera dicho algo distinto diez años después. Siempre hay cosas que determinan el cómo creas en ciertos periodos.

Algo que creo que la gente malinterpretó con respecto a mi persona es que empezaron a creer que le estaba diciendo a otros el cómo deberían de crear. Y yo no estaba haciendo eso, no les estaba diciendo: -Ustedes solo deberían utilizar dos amplificadores y nada más-. Claro que no lo hacía, pero si me preguntan cómo me gusta, pues diría que me gusta usar dos amplificadores. ¿Habrá un día en el cual alguien me presente un amplificador sólido que suene increíble sobre el escenario y que lo voy a preferir?, seguro lo habrá; pero, si me preguntan, lo primero que llega a mi cabeza es que me gusta usar dos.

Creo que lo que la gente no entendió que me hace distinto es que tengo una gran boca con respecto al cómo hago las cosas y eso es porque estoy atemorizado de resultar aburrido. Odio cuando escucho una entrevista con cualquier artista y su respuesta es: -No lo sé, solo sonaba genial, tuvimos mucha diversión-. Woahh, no hay nada de interesante en eso. Yo quiero saber qué métodos usaron, cómo obtuvieron ese tono de guitarra, cómo lograron ese sonido vocal que tienen. Quiero escuchar algo, algún método.

Así que siempre he tratado de darle eso a la gente, darle métodos de los cuales se pueden alimentar. El problema es que cuando profundizas en ello, la gente quiere encerrarte en un agujero, diciendo: -Bueno, esto es lo que eres y lo que harás por el resto de tu vida-. En especial con una banda como The White Stripes. Una banda tan simplificada, en la cual estábamos tan centrados alrededor de la simplicidad, que la gente asumió que ese era quien iba a ser por el resto de mi vida y yo estaba como de: -Noo, esta solo es una de las bandas en las cuales he estado a lo largo de mi vida, pero he estado en quince proyectos distintos-.

The White Stripes solo resultó ser aquella que a la gente le gustó jajaja y estoy agradecido, muy agradecido por ello. Estoy contento de que haya conectado con la gente, pero también estoy en shock de que haya sido justo esa banda la que conectara con las personas. Yo hubiera creído que sería algo más tradicional, pero tal vez fue justo por ello que funcionó. No lo sé.

Sí, seguro es porque fue un proyecto extraño.

Sí, tal vez simplemente fue por ello.

Sé que has estado escuchando mucho hip-hop en años recientes. Incluso leí que describiste al Yeezus Tour de Kanye West como el show más punk que hayas presenciado en muchos años… Así que quiero saber si esta afinidad, este nuevo gusto por este tipo de música, tuvo un impacto para que decidieras trabajar con nuevos métodos de producción.

Sí, cuando yo era joven, por ejemplo, cuando era principalmente un baterista que empezó a tocar la guitarra en su habitación y a grabar todos los instrumentos por si mismo en un four-track, el hip-hop era algo que me gustaba y que podía escuchar y todo, pero no era algo en lo cual pudiera centrarme porque no podía interpretarlo. No podía tocarlo en mi guitarra, no podía tocarlo en una batería, necesitabas una caja de ritmos y tal vez un par de tornamesas, además de la habilidad de rapear. Yo no tenía nada de eso. Mi enfoque estaba claramente en espacios como el punk y el rock and roll, espacios en donde podía hacer algunas cosas, ¿sabes?

Ahora que he trabajado con tantos músicos a lo largo de los años, sobretodo a nivel nacional, que hay tantos tipos de músicos de folk, country, rock and roll y hip-hop también, claramente, he tenido la oportunidad de alimentarte de distintas ideas e ir a distintas zonas en las cuales puedes elaborar y ver si hay algo interesante con lo cual puedas salir. Es combinar los estilos distintos que tienes dentro. Eso me parece muy interesante.

La banda que tenemos ahora: Daru Jones, en los tambores, es un baterista muy orientado a la música hip-hop, por lo cual es muy interesante escucharlo tocando una canción de The White Stripes o The Raconteurs. El pianista Quincy McCrary creció tocando y cantando música góspel, así que es muy interesante ver lo que puede hacer con una canción country.

Yo me alimento de esto y veo qué puedo integrar a todos estos mundos ya que no sé quién soy, ¿sabes? Crecí en un vecindario totalmente mexicano en la ciudad de Detroit, no en los suburbios, que es donde toda la gente blanca vive, escuchando música que a nadie a mí alrededor parecía importarle mucho. A todos les gustaba la música house y el hip-hop y a mí me gustaba eso, no me disgustaba, pero a nadie le gustaba el rock and roll… Guns N Roses, The Cramps, todas las cosas que escuchaba cuando tenía 12 o 13 años.

Así que realmente no sé cuál es mi cultura, es una mezcla extraña de muchas cosas.

Creo que ese parece ser el estado del mundo actual y de todos los adolescentes contemporáneos.

Así es. Es lindo ver que ahora te puede gustar Jay-Z, Metallica y seguir siendo la misma persona, ¿sabes? Es mucho más aceptado hoy en día debido a la Internet, creo. Te pueden gustar muchos estilos y cuando era un niño casi se te obligaba a hacer una decisión… -Soy un gótico-, -soy un punk- y ahora no tienes que hacer eso, eso es genial.

Ahora tienes una mayor libertad para definirte. No te tienes que definir o clasificarte a los ojos de otras personas.

Exactamente, así es.

Ahora que estabas hablando sobre el cómo creciste en un pueblo repleto de mexicanos, quiero decirte que esos versos que escribiste para ‘Icky Thump’ en los cuales describes que la gente blanca también debería de ser deportada, puesto que son tan inmigrantes como los latinos, ha resonado mucho en México. Me gustaría profundizar un poco más con respecto a la visión que tienes sobre la migración.

Claro que sí. En ese momento, cuando compuse la canción, había una marcha. No recuerdo el nombre de la organización que pudo haberla iniciado, no lo sé, tal vez puedas investigarlo, pero hubo una marcha de trabajadores latinoamericanos en Estados Unidos que decidieron dejar su trabajo por un día, en todo el país, y marcharon a favor del progreso.

Eso enfadó mucho a las personas debido a que les aterrorizó el darse cuenta de que los trabajadores latinoamericanos son una gran parte de la columna vertebral de los Estados Unidos y qué tan poderosos pueden ser si llegan a organizarse. Eso aterrorizó a la cultura blanca del país, podías ver en las noticias que estaban muy asustados.

Fue algo muy extraño de ver, el observar a la gente reaccionando de esa forma tan estúpida porque inmediatamente las personas empezaron a hablar de migrantes ilegales, de la frontera, etc… A mí me pareció absolutamente ridículo, fue como si nunca hubieran notado esto. ¿Cuál es el porcentaje? El 15% – 18% del país es latinoamericano y es una locura que eso no haya estado presente en la mente de todos en ese punto.

Lo divertido es que el video que grabamos para la canción, lo hicimos hablando sobre una gran pared en México, de forma metafórica… pero esa terminó siendo la tontería que Donald Trump empezó a impulsar años después jajaja. Eso fue tan raro, ni siquiera hacía sentido, solo era divertido ver tanta ironía.

¿Qué tipo de música se escuchaba en el pueblo en el cual creciste?

Oh, en los años ochenta era una mezcla de música tradicional con house. Si te sentabas afuera de mi porche, hubieras escuchado mucha música mexicana saliendo de los automóviles y una fiesta en la calle repleta de piñatas con una banda de mariachi. Eran todos los géneros, música banda, muchos géneros mexicanos que salían de las casas y de las bocinas. Eso mezclado con el hip-hop de la época, como LL Cool J, Run DMC, junto con música house y los primeros años del techno, que empezó a popularizarse a principios de los años noventa.

Así que eso es lo que escuchabas en todos lados mientras yo estaba sentado en el porche tocando una canción de The Yardbirds en mi guitarra jajaja. La gente pasaba caminando y se me quedaban viendo raro, se burlaban, ¿sabes?

La fortuna para mí es que soy un poco estúpido en relación con esos temas. Creo que la mayoría de las personas de mi pueblo o de mi edad hubieran parado de hacer lo que yo estaba haciendo debido al miedo de no encajar. Yo nunca fui ese niño, era aquel chico que, si veía que todos compraban tenis Adidas en aquel año, iba a comprar unos Nikes solo para ser distinto. -No quiero hacer lo mismo que hacen todos los demás-. Eso fue un poco estúpido de mi parte porque pude haber tenido muchos más amigos de los que tuve si me hubiera interesado en integrarme un poco más. Pero tal vez eso hizo que me forzara a buscar música cada vez más extraña en la cual interesarme, me obligó a encontrar mi propia voz.

Creo que una de las razones por las cuales eres tan importante es que, en cierta forma, ayudaste a retomar las raíces de la música estadounidense, con todos estos géneros afroamericanos en los cuales pusiste una nueva luz… Géneros que estaban siendo olvidados. Me gustaría saber si tienes algún pensamiento con respecto al por qué es importante traer de vuelta las raíces a la música.  

Bueno, la música que yo encuentro interesante, mucha de ella, tiene una base en el blues, por lo menos en la música americana.

Es difícil decir de la música mexicana que escuchaba en mi vecindario, por tomar un ejemplo, pero podía escuchar ecos de música folclórica alemana en ella. El acordeón y los bajos huecos, potentes, de la tuba. No sé las raíces de ello, no tengo idea si hay alguna conexión o no, no he investigado de dónde vienen esas instrumentaciones.

Tienes razón, la música del norte de México tiene su raíz en la polca que trajeron los migrantes polacos.

Eso es lo mismo que puedes decir cuando escuchas el blues y escuchas que muchos de sus instrumentos devienen del oeste africano y que fueron traídos al sur de los Estados Unidos. Esos instrumentos, cuando llegó el Siglo XX, se convirtieron en la guitarra de seis cuerdas, el bombo y el tambor.

Cuando aprendes sobre estas cosas, cualquier cultura de la cuál seas… Hay un blues ahí. Hay un blues en Irlanda y en Escocia, en su música folclórica. En Alemania. Hay un blues en Estados Unidos y en México. La raíz de todo depende de qué tan lejos en el pasado quieres ir. Llámalo como quieras llamarlo, yo simplemente le digo -el blues-.

Así que, cuando identificas eso, creo que te abre la mente a cosas increíbles. Por ejemplo, el heavy metal… Me gusta un poco, nunca estuve obsesionado, pero me gusta Deep Purple, Rainbow, cosas de los años noventa, como Helmet y System Of A Down, un poco, sus ritmos. Me ha gustado el metal en ciertos momentos. Pero, con el tiempo me he dado cuenta de que los guitarristas que me gustan del heavy-metal están basados en el blues, eso me gusta mucho más que cualquiera que pueda tocar tres mil notas por minuto.

Me gusta Richie Blackmore cuando tiene una línea de bajo de blues debajo de todo lo que está haciendo y no sé, tal vez solo sea un medio a través del cual pueda entrar a este tipo de música y relacionarme con ella.

Todo está conectado, ¿no es así? En la misma raíz.

Así es. Eso es lo que creo. Tal vez algún día los arqueólogos descubran algo en relación con que la primera canción de blues fue compuesta en África y que se divulgó de alguna manera a todo el mundo, gestando el nacimiento de la música folk y las melodías folclóricas irlandesas o algo por el estilo jaja.

¿Quién sabe?, pero parece que hay algo más profundo en esto. Tal cómo el por qué los humanos bailamos en beats de 4/4, el -boom, boom, boom-, en lugar de algo mucho más complejo, como -purupupupupu-. No sabemos por qué lo hacemos, pero debe haber algo más profundo en ello. El latido del corazón, probablemente.

Así es, se dice que es debido a que es el ritmo que más se acopla al latir del corazón.  

Sí, eso hace sentido.

Una de las cosas que más me interesan hablar contigo es este tema… La gente dice que tienes una obsesión con el número tres y me gustaría saber qué significa ese número para ti.

Es una forma en la cual equilibro mi celebro, es un tipo de bendición. Es como el incienso de la iglesia o algo por el estilo. Pensar en el número tres me da un medio de encontrar una entrada. Es un balance, tiene una línea en el medio y otra a cada costado. Es un símbolo del balance, las tres piernas de una mesa.

El mínimo necesario para ser capaz de respirar, salir y hacer más con ello. Toma a The White Stripes como un ejemplo: Vocales, guitarra y batería. Vocales, piano y batería. Había algo con respecto a estos tres elementos que me obligaba a pensar en: -Bueno, ¿qué puedo hacer con estos tres para transformarlos en seis o siete elementos de alguna manera?-. Tocar la guitarra rítmica, armónica y la principal al mismo tiempo; tomar un sintetizador con mi mano izquierda al mismo tiempo que canto en una nota distinta y armonizo con ella.

No lo sé, tal vez me miento a mí mismo. Tal vez solo había tres elementos en todas aquellas canciones y no puedes obtener más. Pero, luego puedes ver una banda de seis piezas en la cual la guitarra, el bajo y el piano tocan la misma nota, así que realmente solo son un instrumento.

Es algo para que mi cerebro trabaje, algo en lo cual pensar. No puedes llegar a conclusiones reales, pero es como una meditación zen o un rompecabezas, un acertijo, que te hace querer balancear las cosas un poco.

Es un medio de empujar un poco los límites. Si te pones limitaciones a ti mismo, podrías descubrir a dónde te llevan.

Sí, exactamente. Creo que eso es algo que la gente no ha entendido bien con respecto a mí. Cada vez que me doy restricciones, la mitad del tiempo, termino rompiendo esas mismas restricciones que hice para mí. Pero, cuando no hay restricciones, no hay nada que romper.

Si dices que puedes grabar quinientos tracks para una canción en ProTools, puedes hacer lo que quieras. No hay reglas y ok, eso está bien, es increíble para muchas personas; pero, para mí, yo diría: -No, veré si puedo hacer esto en 10 tracks-. Tal vez no pueda hacerlo, tal vez necesite 14 o 17 tracks, no lo sé; pero, quiero intentarlo y ver qué pasa con mi cerebro si se me presenta un método.

Como compositor, a veces tomo el papel de una tercera persona. Me gustaría que hubiera alguien parado siempre a un lado de mí, haciéndome seguir ciertas reglas, diciéndome: -Mira, toma cuatro o cinco frases de este sombrero y compón una canción con ellas-. Apreciaría mucho si alguien, una persona imaginaria, hiciera eso por mí. En lugar de ello, lo hago por mi cuenta, en un espejo.

Tus tres proyectos principales también siguen la regla de tres elementos dentro de sus paletas de colores. The White Stripes es rojo, negro y blanco; Third Man Records es amarillo, negro y blanco; y en tu proyecto solista tienes azul en lugar del rojo y del amarrillo. Estos son los colores primarios…

Así es, tienes razón. Es la forma en cómo resultó al final jajaja.

Ohh, creí que podría haber sido algo consciente.

Bueno, que mi carrera solista fuera azul es porque era el color que faltaba, ¿sabes? Porque Third Man Upholstery, mi negocio de mueblería, era amarrillo, negro y blanco. Cuando llegó The White Stripes, poco después, fue rojo, negro y blanco.

Esas eran las únicas dos cosas que tenía en las cuales establecí una línea de colores que me guiaran dentro de mi vida creativa. Así que cuando empecé mi proyecto solista, el azul era el único color que quedaba… Así que hacía sentido.

¿Crees que el sentimiento de los colores de cada proyecto simboliza muy bien la naturaleza de cada uno de ellos?

No lo sé, es una muy buena pregunta. Tal vez, en muchas formas, son insignificantes. Me gusta preguntar el por qué los billetes estadounidenses son verdes, ¿sabes? Nadie sabe por qué son verdes, tal vez simplemente son verdes. Es probable que sea por algún tipo de utilidad que lo hace difícil de falsificar, tal vez porque es un color que era difícil de replicar en las impresoras de la época. Pero, a ti te llega solo porque sí, lo identificas y no piensas más al respecto, ¿sabes?

The White Stripes era negro, blanco y rojo. Lo decidí así porque vi un dulce, el caramelo de menta que se transformó en una especie de ícono para el proyecto. Vi uno quemándose una vez, lo ví quemándose a un lado de una fogata y noté que una lava negruzca empezó a brotar de él. Pensé: -Ohh, wooow, uno nunca pensaría que el color negro saldría de ese dulce-. Así que esa fue la razón por la cual elegí a esos tres colores para la banda.

También me gustaría platicar un poco con respecto a los discos de vinilo siendo que apostaste en ellos en una época en la cual nadie lo hubiera hecho. Para mí, es interesante hablar con respecto a la necesidad que tenemos de poseer cosas que nos distinguen, como libros, arte, juguetes, música. Me gustaría saber tu visión con respecto al por qué la gente sigue comprando discos de vinilo siendo que es mucho más sencillo escuchar música en plataformas de streaming y puede llegar a sonar prácticamente igual de bien.

Así es. Todas las razones en las cuales puedo pensar son interesantes y buenas. Aun no puedo creer que el mainstream del mundo piense en las mismas razones del por qué es interesante, pero así lo hace jajajaja.

Si hace quince años me hubieras preguntado si creería que el mainstream volvería a abrazar al vinilo, yo hubiera dicho cortantemente que no jaja, no había manera. Creí que el impacto sería de una forma muy pequeña y es algo en lo cual estuve trabajando durante veinte años.

Creí que conectaría con ciertas personas y mi objetivo principal con Third Man Records era… Empezamos a imprimir ideas que teníamos de ediciones limitadas, discos que brillan en la obscuridad, vinilos de distintos colores, tratando de empujar un poco las posibilidades del fórmato. El objetivo principal de aquella etapa era simplemente ayudar a las pequeñas tiendas de discos para que no cerraran, darles algo para vender, ¿sabes? -Si vamos a ser un sello discográfico, tenemos que darle a estas tiendas algo para vender-.

Íbamos a hacer discos de vinilo sin importar qué, ese era todo el propósito de nuestro sello, pero teníamos que darles algo especial. Y creo que esos lanzamientos que hicimos, esos primeros lanzamientos del 2009 de Third Man Records fueron el inicio de una nueva era en la cual la gente se empezó a interesar en vinilos de color y en ediciones limitadas.

La gente ya hablaba al respecto de los vinilos negros en los años 90 y casi se van en los 00, pero cuando se introdujeron las ediciones limitadas a color… Ahí fue cuando empezó a caputrar la imaginación de las personas y se convirtió en algo mucho más popular. Creo que es un tema de novedad y que realmente no importa, pero es lo suficientemente impactante a nivel estético como para hacerlo interesante.

No es como que pudieramos hacer algo similar con los DVD’s. -Hey, ¿sabías que la nueva película de Star Wars está disponible en un DVD edición especial que brilla en la obscuridad?-, jajajaja. No podemos tener eso, pero tal vez algún día tengamos algo similar que haga que las personas quieran poseer una vez más sus películas favoritas en algún tipo de objeto.

Quiero saber cuáles son tus tiendas de discos favoritas en el mundo…

Oh woow, hay tantas. Pero, diablos, déjame pensar en esto un poco. Bueno, me gusta mucho Rough Trade en Londres, en donde acabo de presentarme y tienen una historia increíble. También me gusta Amoeba en San Francisco, esa es muy linda. Además, hay muchas, muchas pequeñas.

Hace poco tuvimos la oportunidad de abrir una nueva tienda Third Man Records en Londres y eso se sintió muy bien. Fue todo un éxito. Estuvimos en Japón hace unas pocas semanas y estuvimos checando la posibilidad de abrir una locación de Third Man en Tokio.

Eso haría mucho sentido.

Sí, sería muy cool. Espero que podamos hacerla. Tenemos que hacer muchos amigos antes y no conocemos realmente a nadie allá, así que tendremos que empezar en ceros, pero eso es emocionante, creo que puede ser un proyecto muy emocionante.

Se está terminando mi tiempo Jack, estoy amando esta conversación, pero tendré que terminarla pronto. Sin embargo, quiero hacerte una última pregunta. Estuve leyendo un ensayo que me pareció muy interesante en el cual describen a ‘Seven Nation Army’ como la última canción folk norteamericana, en el sentido de que una canción folk es una pieza que adopta la vox-populi. Pensé al respecto y creo que están en lo correcto… No pude recordar otra canción moderna que haya sido adoptada por el pueblo en ese sentido tan masivo y personal. ‘Seven Nation Army’ es tan grande que vas a cualquier estadio o a cualquier bar aquí, en México, y las masas la están cantando. Quisiera saber tu opinión al respecto.

Es… Ufff, es simplemente sobresaliente. No puedo creerlo. Simplemente no puedo creerlo porque… Me gustó ese riff cuando lo compuse, creí que era poderoso, pero la gente a mí alrededor no creyó que fuera tan interesante.

La grabamos muy rápido y cuando el álbum estuvo listo, los sellos no querían publicarla como un sencillo. Creo que te muestra que nadie sabe, simplemente nunca sabes qué pasará. Es como lo que pasa ahora con esa canción de Kate Bush en Stranger Things, ‘Running Up That Hill’. ¿Por qué esa canción, por qué ahora? Es una gran canción, pero ¿por qué ahora? No lo sabemos, ¿quién sabe?

Puedes tocar mil canciones en Stranger Things y a la gente no le importaría, pero por alguna razón la gente conectó con esta canción y es mágico cuando eso sucede. A veces pasa por un minuto, por un año y a veces pasa para siempre, ¿sabes? La gente sigue aprendiendo a tocar guitarra con ‘Smoke On The Water’ y es muy lindo entrar a una tienda de instrumentos musicales y escuchar que alguien está tocando ‘Seven Nation Army’ la primera vez que toma una guitarra. No hay nada más importante, me quita el aliento, no puedo creerlo.

¿Crees que es tu mayor logro?  

Definitivamente sería difícil de superar jajajajaja.