// Por: Staff

lun 22 agosto, 2022

Por: Diego Vázquez

Ya transcurrieron casi tres décadas desde que el cuarteto de Bristol, Inglaterra Portishead  irrumpiera con su Trip-Hop en su afamado disco debut Dummy.  Aquél 22 de agosto de 1994 fue el año clave que Beth Gibbons, Geoff Barrow, Adrian Utley y Dave McDonald editaron el LP que es vital para el género. 

Considerado por los críticos un disco esencial del cuarteto y que marcó un antes y un después de Portishead, dejando que el año 1990 fue vital para discos posteriores: Portishead (1997) y Third(2008). 

Dummy pegó fuerte para una banda que se gestó años después que sus compatriotas de Massive Atack y que, de alguna forma, su cantante Gibbons lo usó a su favor. Brotaron de la efervescencia de la música de los 90, incubando sonidos un poco subestimados de su época, destacando su potente voz, misma que la hizo encontrar un hueco en ese estilo incipiente que cautivaba al Trip-Hop. 

Portishead le ofrecía a esos años noventa con Dummy canciones de música electrónica con vertientes con inclinación al hip hop experimental; pero que a su vez combinaba elementos de  dub, jazz, soul y música alternativa, todos juntos en ese disco publicado por London Records.

Para sus composiciones recurrían a los sampleos, el reconocible ruido del scratch de los vinilos y técnicas del turntabilismo. Muy destacable de los pioneros del Disck Jockey. No en vano, resaltaron a Bristol, su ciudad natal, como epicentro de gestación de agrupaciones de la gloriosa década de los noventa. 

Sobresalir entre la niebla

Este primogénito disco de Portishead vio la luz entre la niebla , es el disco vintage que se queda como una pieza de reliquia donde Adrian Utley, su guitarrista y demás integrantes producirían este disco. 

Sin duda, Dummy es el álbum que catapultó a la banda cuando previamente había publicado un EP , este disco fue un impulsor de canciones cinemáticas en el que los pedales y los beats creaban atmósferas oníricos.  Estas canciones que a 28 años de distancia pudiese ser bien adaptada a una banda sonora de vida, en la que más de uno canta. 

Con su disco debut, Geoff Barrow, Beth Gibbons, Clive Dreamer, Jim Barr, Dave McDonald y Adrian Utley representaron la melancolía en una producción excelsa. Junto con el disco Protección ( 1994) de Massive Attack incubaron al Trip-Hop.  En el que este y Dummy son las obras que enaltecieron el género que dejó en claro cuál debería de ser el molde predilecto para una producción que aún con varias décadas encima , sigue por deleitarnos . Haciendo como si esos años noventa no hubieran pasado por encima de nosotros. 

Quizá ni los mismos Portishead se imaginaran lo que Dummy provocó , dando así como una oda a su ópera prima. Donde su sonido británico electrónico cimbró para quedarse sonando en la mente. Recordar canciones como ‘Numb’, ‘Mysterons’, ‘Glory Box’ o ‘Biscuit’ forman parte de este disco angular en la historia de la música.