Esta ha sido una triste mañana para la isla de Japón, puesto que la violencia ha azotado al país como pocas veces se ha visto en su historia. El ex-primer ministro japonés Shinzō Abe, de 67 años de edad, recibió dos disparos por la espalda mientras se encontraba otorgando un discurso publico, un acto de campaña para las elecciones nacionales del próximo domingo.
Él se encontraba apoyando a Kei Sato, candidato Partido Liberal Democrático del cual Abe se volvió su Presidente en 2006, que está buscando la reelección en la cámara alta del Parlamento. Abe renunció a su puesto como Primer Ministro en 2020 debido a problemas de salud, pedo seguía siendo una poderosa figura en su partido y un rostro de gran influencia pública.
La importancia de Abe es abismante si tomamos en cuenta de que se trata del único político en la historia de Japón que ha sido elegido como Primer Ministro en dos ocasiones distintas. Es el primer ministro con más años de servicio en la historia de Japón y uno de los mejor valorados.
Al respecto del evento, el Primer Ministro Fumio Kishida calificó el asesinato como “un acto de barbarie cobarde” “Una vez más lo condeno con las más enérgicas palabras”, declaró, añadiendo que las elecciones libres y justas son la base de la democracia y que deberían de protegerse.