Rodeado de banderas anaranjadas y de bengalas coloridas, Max Verstappen se coronó campeón del Gran Premio de los Países Bajos. El neerlandés provocó una fiesta nacional al dar la cara por su pueblo y gestar una victoria más que lo acerca a ser el ganador del Mundial de Pilotos de la Fórmula 1, alejándose cada vez más de Lewis Hamilton.
Se trató de una carrera estratégica, sin golpes, ni accidentes, en la cual el líder de Red Bull Racing salió sin sobresaltos y defendiendo la primera posición de inicio a fin. Hamilton trató de rebasarlo en un par de ocasiones, adelantando sus paradas y acelerando en las vueltas, pero no le rindió ningún resultado, puesto que Verstappen siempre salió por delante del británico.
El líder de Mercedes fue perdiendo terreno poco a poco y un plan que consistía en presionar al apodado Mad Max con el auto de Bottas tampoco le funcionó a la escudería. Al final, aunque ambos monoplazas dieron lo mejor de sí, tensándose tras muchas vueltas sin paradas, ni cambios de neumáticos, ambos quedaron en segundo y tercer puesto.
El resto de los competidores tampoco impresionaron mucho, en una carrera tranquila. Pierre Gasly mantuvo el cuarto puesto, seguido de Charles Leclerc de Ferrari. El español Fernando Alonso dio una gran carrera, remontando un buen puñado de puestos hasta quedar en la sexta posición. El mexicano Sergio Pérez no tuvo mucho movimiento, quedándose en la octava plaza.