“Siempre van a haber esos temas que van a romper duro, que van a marcar la diferencia… como siempre, como en todo”, es lo que respondió Eladio Carrión tras preguntarle si le aterra la idea de que en un punto el trap pierda -la calle-, -la sinceridad- que lo caracteriza, para, en su lugar, ser solo una nueva fuente de éxitos pop. “Va a haber cien temas que se parecen y de esos cien, uno marca diferencia y se pega”… su discografía ha sido una muestra de ello.
Su nombre ha estado presente desde hace varios años, como influyente dentro de la industria y como un rapero que siempre está dispuesto a colaborar, colocando sus líneas en temas de éxito. También como un descubridor de nuevas voces que… según dice la leyenda, fue la primera persona que reconoció el talento de Bad Bunny y lo recomendó al sello Rimas, cambiando la historia de la música latina. Siempre presente, aunque, como una sombra. Se sabía de él gracias a los murmullos, pero hoy está tomando por primera vez los reflectores, dejándose conocer, al desnudo, a un público que estaba hambriento por saber lo que tenía por decir.
Poco menos de un año después de su álbum debut Sauce Boyz (2020) y ya tiene dos álbumes más, Monarca (2021) y SEN2KBRN VOl.1 (2021), con los cuales junta más de ocho millones de escuchas mensuales en Spotify y el respeto de uno de los públicos más demandantes de la música presente. Trap duro, pero futurista, repleto de detalles alucinantes dentro de su producción que se alejan de los convencionalismos de las bases de rap para, en su lugar, entregar experiencias kaleidoscópicas que gritan por la atención del escucha y que lo recompensan. Su música es distinta a la de sus contemporáneos y eso le ha traído grandes frutos.
“Básicamente la intención era invitar a las personas a no tener miedo de ser diferentes… a hacer las cosas diferentes”, declaró sobre su primer álbum, remarcando que en esta industria la originalidad es siempre el elemento que marca la diferencia y que te puede convertir en un ganador. “El ritmo tiene que ver mucho, la producción tiene que ver mucho y yo siempre trato de no repetir las cosas. Si tú escuchas mis ritmos, es bien raro que yo repita un tipo de ritmo porque siempre quiero hacer cosas diferentes, me gusta retarme”.
Con respecto a su álbum Monarca (2021), él declaró que su inspiración fue que “decían que, si te encontrabas a una mariposa monarca en el camino, es porque estás por el buen camino. Yo sentía que estaba, en ese momento, como que ese disco era lo que me faltaba para explotar. Eso era lo que yo sentía, ¿me entiendes? Que ese era el camino”.
Ahora mismo está promocionando el remix de su éxito ‘TATA’, mismo que cuenta con la participación de figuras como Daddy Yankee, J. Balvin y Bobby Shmurda, personajes que “llevan muchos años en el negocio, moviendo la cultura, moviendo para que las cosas se hagan mejor”.
Él, por otro lado, va por el buen camino… marcando su influencia tal y como sus referentes han hecho con él. En su presentación en el icónico Choliseo de San Juan, Puerto Rico, del pasado 20 de agosto, Eladio invitó a Bad Bunny a interpretar su colaboración nominada al Grammy ‘Kemba Walker’.“Fue de las primeras personas, si no fue la primera, que me dio la mano hace cinco años en este viaje y hoy está aquí, haciendo tres funciones, sin saber que hacías cinco en el Choli. Agradecido siempre contigo, Eladio. Te quiero mucho, lo sabes, y te considero familia”, afirmó el Conejo Malo sobre el escenario.
Oye me interesa mucho hablar del presente del trap porque parece que está llegando a la etapa en la cual se colocó la música underground, el reggaetón hace una década…
Sí, claro. Creo que fue así, como pasó en Estados Unidos, el trap se pegó así. Hay artistas que llevan haciendo trap desde el 2010, 2011, pero se pegó en el 2016, 2017, se apagó un poquito, pero ya está volviendo. Si es calle, es trap.
Claro, pero, ¿no te da miedo que se esté haciendo tan popular que pierda -la calle-, que la gente lo empiece a utilizar para hacer baladas pop, fresas, como sucedió en su momento con la popularidad del reggaetón?
Claro, pero siempre van a haber esos temas que van a romper duro, que van a marcar la diferencia… como siempre, ¿sabes? Siempre va a haber cien temas que se parecen y de esos cien, uno marca diferencia y se pega. Es como todo, es normal.
Para mí eres un artista muy interesante porque no haces un trap básico, tus bases no juegan con estructuras tradicionales, suenan avanzadas… no a un nivel progresivo, pero sí como pastiches de muchas cosas distintas.
Yo la producción, le meto duro. Mis productores, mis ingenieros. Lo más importante para mí es encontrar el ritmo perfecto y si no lo encuentro, tengo que crearlo desde cero. Hermano, el ritmo es lo primero que escuchas, desde que pones el tema.
Yo escucho los primeros dos segundos de una canción y digo –wow-. Si en los primeros dos segundos tú pudiste romper, es un paro. El ritmo tiene que ver mucho, la producción tiene que ver mucho y yo siempre trato de no repetir las cosas. Si tú escuchas mis ritmos, es bien raro que yo repita un tipo de ritmo porque siempre quiero hacer cosas diferentes, me gusta retarme.
¿Dirías que una de tus reglas para publicar un tema es que te hable a los dos segundos?
Exacto. Si yo escucho mi ritmo, tengo que asegurarme de que cuando el DJ lo pone en las parties, la gente sabe desde que pone la canción que se trata de un súper artista. Desde el comienzo, el ritmo se tiene que escuchar lindo.
Bueno, estamos aquí para hablar del remix de ‘TATA’, el cual viene muy duro con colaboraciones de Daddy Yankee y Bobby Shmurda, además de J. Balvin que ya estaba en el tema original. ¿Cómo fue colaborar con ellos?
En un trap, fue algo inesperado. Hermano, yo desde que hice ‘TATA’ le dije a Jose (J. Balvin) – mira, te digo la verdad, si no se unen Daddy Yankee o Bobby Shmurda, no voy a sacar el tema-. Y las cosas pasan. Se terminaron montando los dos en la canción. Es un tema que sé que la gente está esperando romper en la calle y está gustando mucho, gracias a Dios.
Me parece que es la primera vez que colaboras con un artista legendario de reggaetón, reggaetón, nada de trap, ¿no?
Compartir con ellos es algo que casi no se siente real, son personas que llevan muchos años en el negocio, moviendo la cultura, moviendo para que las cosas se hagan mejor. Compartir con ellos es una bendición. Fue una bendición. Yankee es una persona muy sabia, hablamos mucho. No creo todavía que sigo hablando con él, el máximo ídolo.
Llevas años en la industria, siempre has estado muy bien conectado y das de qué hablar, pero creo que nunca te había sentido tan presente como ahora. Has lanzado dos álbumes en este año, un montón de sencillos y de colaboraciones duras, ¿qué pasó en esta pandemia para que empezara este cambio?
Mi hermano, me enamoré de hacer proyectos. Hay artistas que son artistas de sencillos y hay artistas que son de álbumes. A mí me encanta hacer discos, montar las historias. Me encanta el proceso, si escuchas mis discos, hasta el flujo de las canciones está pensado. Me gusta darle una experiencia que una canción no me da, tengo que juntar varias canciones para que sienta la experiencia completa, ¿me entiendes? Por eso empecé a hacer discos.
Vamos a repasar tus discos, me gustaría que cuando te nombre un título, me digas de qué trata, por qué es lo que es… empecemos por Sauce Boyz.
Niño salsa, es mi carta de presentación al género. Lo que hoy en día, todo el mundo se tatúa la flor, es bastante viral. Básicamente la intención era invitar a las personas a no tener miedo de ser diferentes… a hacer las cosas diferentes.
Si tú escuchas Sauce Boyz, nadie había hecho un disco así. La producción que sea más trap que reggaetón, que sea un funk-pop, que es lo que está pegando ahora mismo. Es un disco que tiene de todo y cada vez que yo saco un Sauce Boyz es eso… un disco que tiene muchos featurings, muchos tipos de ritmos.
Sigamos con Monarca.
Ese nombre lo saqué en Los Ángeles. Me gustaba un montón y dicen que, si te encontrabas a una mariposa monarca en el camino, es porque estás por el buen camino. Yo sentía que estaba, en ese momento, como que ese disco era lo que me faltaba para explotar. Eso era lo que yo sentía, ¿me entiendes? Que ese era el camino. Que después de ese disco de trap lo sintieras completo. Es un disco que tú escuchas y que no tiene nada de reggaetón, es todo trap.
No sé si lo estoy pronunciando bien, pero SEN2KBRN Vol. 1, ¿de qué trata?
Básicamente hermano, es un regalo para los fanáticos. Estaba viendo cómo a ellos les encantaba consultar los freestyles o consultar los temas solos y dije –vamos a aprovechar que estamos en pandemia, la gente quiere estar escuchando cosas en la casa, tal vez fumando, tal vez bebiendo y estaría bueno un disquito de freestyle-.
Es un disco para escuchar, no es uno para la discoteca, no es para perrear, es para sentarte y realmente escuchar. Tiene muchas barras, es un disco de freestyle.
Es algo interesante, los artistas legendarios de trap latino, como Arcángel, De La Ghetto, crecieron, como tú, en los Estados Unidos. A mí me gusta hablar con estas figuras, preguntarles si ese contexto los ha ayudado a traer cosas nuevas a la música latina.
Claro, yo tengo mucha influencia de la música anglosajona en cómo escojo los ritmos. Uso muchos productores de allá afuera, un productor como Andre The Giant, productores que trabajan en Estados Unidos. Es eso, mi influencia es bien grande de Estados Unidos. La música que consumía de chiquito era RUN DMC, Eminem, 50 Cent y NAS, era eso.
Ohhh dijiste NAS, su último álbum, King’s Disease II está muy bueno, es una maravilla..
Tiene el disco más duro ahora mismo allá afuera. Hit-Boy siempre es un productorazo, es uno de mis productores favoritos. Es muy difícil hacer eso con un disquito de rap porque la gente ya no escucha rap como antes, ese disco está demasiado cabrón. Claro, es que Hoy-Boy es una bestia, tenía que superar la primera y la primera estaba muy cabrón, la rompió con la segunda.
¿A ti te gustaría hacer algo súper old-school, algo tipo NAS?
Yo tengo un rapsito por ahí, un rap que voy a sacar en estos días con Arcángel. Es un rap duro, duro, para la calle. Lo vamos a transportar para adelante, para el 2002.
¿Cómo es tu relación con Arcángel?
Arcángel es una bestia, hermano. Es una persona con quien verdaderamente me pudo sentar a hablar con él y tranquilo, un gran ser humano. Es súper fácil hablar con él, es bien asequible. Le he aprendido desde antes de conocerlo, es uno de mis raperos favoritos, top cinco sin pensarlo. Arcángel es uno de los raperos más versátiles que han existido en el género, me entiendes.
Oye, no leí bien esa entrevista, pero topé que dijiste que vas a trabajar con Drake…
Eso lo digo yo… pero va a pasar. Lo digo como chiste, pero a la vez no es chiste. Yo sé que eso va a pasar. Eso vendrá después, pero cuando lo tenga la gente va a decir –ya lo pegó con ese tema-.
También leí que fuiste una estrella de Vine…
Era una estrellita en Vine, hice stand-up comedy, fui nadador profesional. Todo lo que he hecho en mi vida lo he hecho con ganas y con pasión.
¿Crees que el hecho de tener que entretener a la gente en la Internet te ha ayudado a ser un mejor showman para los conciertos, ahora, en tu proyecto musical?
En verdad, lo más que me ha ayudado es la tarima de stand-up porque te ayuda a controlar al público, manejarlo, lo entiendes mejor. Es mucho más difícil que en la música. Esa manera que tengo de presentarme en tarima es gracias al stand-up.
Sé que muchos músicos sacan sus energías de los conciertos en vivo y ahora ha sido difícil lidiar un poco con los silencios…
Yo he tenido unos cuantos, en estos días, he estado haciendo conciertitos por ahí, vamos a ir España próximamente si Dios quiere y la pandemia no sigue empeorando.
Pero tú, ¿cómo la has pasado en esta pandemia?
Tranquilo, nomás me he cuidado, hemos estado trabajando en música.