Tras múltiples cambios de fecha de estreno, llega la película en solitario de Black Widow a las salas de cine y al servicio de plataforma de Disney +. Esta es la película número 24 del Universo Cinematográfico de Marvel y la segunda en ser protagonizada por una heroína. También es la primera en ser dirigida en solitario por una mujer, Cate Shortland, una directora australiana que adquirió notoriedad por su película Lore. Además de esto, inaugura la Fase cuatro de este universo.
Scarlett Johansson interpreta nuevamente el papel de Natasha Romanov, una ex-espía rusa convertida en Vengadora que intenta remediar los errores de su pasado desde que se unió a la organización S.H.I.E.L.D. Los acontecimientos del pasado toman relevancia en está película al mostrar una parte de su pasado y las consecuencias de sus actos al cambiar de bando.
Los acontecimientos de la película suceden cronológicamente después Capitán América: Guerra Civil y antes de Vengadores: Infinity War, mientras Natasha huye del Secretario de Defensa Ross (William Hurt). Scarlett, esta vez también en el papel de productora, influyó en la contratación de la directora Cate Shortland y el fichaje de la actriz nominada al Óscar, Florence Pugh, uno de los aciertos de la película.
Natasha ahora se reecuentra con su pasado y con personas de su infancia en una película de acción que toca los temas de la familia y la trata de blancas. Black Widow acierta en la acción y se sustenta en la relación de Natasha con su “hermana” Yelena (Pugh) y sus “padres“ Melina (Rachel Weisz) y Alexei (David Harbour). Aunque en un principió rechaza estas relaciones por no considerarlas reales, convirtiéndolos en una divertida y disfuncional familia. Aun con esto, toca de manera muy superficial temas trascendentales como el tema de la trata de blancas que se pierde en la acción y en una conclusión pobre, llena de explosiones y acrobacias.
Scarlett se muestra sólida en su papel de Natasha y Florence destaca como una versión menos seria y más humana de una espía, que después de cada batalla necesita un ibuprofeno. Rachel Weisz hace un papel de madre que intenta ser conmovedor, pero que tiene poco tiempo en pantalla y David Harbour es relegado a la parte cómica del a familia como un padre estilo Pedro Picapiedra, que siente nostalgia por sus tiempos de gloria como un supersoldado soviético. Este es otro punto flaco en la película, ya que como es tradicional en las películas de Marvel, los momentos dramáticos siempre son interrumpidos por un chiste para aliviar la tensión.
Lo más negativo de Black Widow son sus villanos. Taskmaster representa un reto físico para las heroínas por su habilidad de copiar los estilos de pelea de los Vengadores, pero carece de desarrollo y profundidad, siendo sólo un elemento para las peleas y escenas de acción. Y el villano principal es una caricatura que carece de carisma y motivaciones reales.
En resumen, Black Widow es una película mediana en la lista de películas de Marvel, con elementos que destacan para el entretenimiento y abre la sucesión de la Viuda Negra en una muy carismática Yelena, que parece que llegó para quedarse. Pero deja en buenas intenciones algunos temas que parecía podían darle profundidad.
La película tiene una escena post créditos muy interesante que apunta a otro proyecto en desarrollo de la gigante de los cómics.