De acuerdo a lo comunicado por Billboard, la plataforma de streaming Netflix acaba de adquirir los derechos de un documental sobre la vida y carrera musical de Kanye West por la suma de 30 millones de dólares.
Lo interesante del proyecto es que está dirigido por los videastas y amigos cercanos del artista Clarence “Coodie” Simmons y Chike Ozah, dúo que co-dirigió el primer video musical en la carrera del rapero ‘Through The Wire’ del 2003. Pues resulta que desde entonces han estado trabajando en un documental junto con Kanye West, mismo que contiene imágenes inéditas e información inédita con respecto a su vida y profesión.
Kanye West es un personaje que divide opiniones, pero hay un consenso a su alrededor: lo que haga es digno de comentarse. Productor, mecenas, personaje de reality show, socialité, diseñador de moda, aspirante a político, West ha abordado varios ámbitos de la creatividad y la vida pública. Ha triunfado y ha caído, pero sobre todo se mantiene relevante en la conversación. Para bien suyo y también para mal.
Su relación con el Grammy es como un romance clandestino: del tumulto al silencio, de la pasión a la frialdad. Desde 2013 su carrera no había sido reconocida por Academia Estadounidense de Grabación, responsable de otorgar el galardón. Ocho años de ser la estrella nominada que no ganaba nada.
El baile de West con el Grammy comenzó en 2005, cuando su álbum debut The College Dropout le dio dos triunfos: como mejor álbum de rap y mejor canción de rap para ‘Jesus Walks‘.
Los éxitos continuaron con el disco Late Registration. Con canciones como ‘Diamonds of Sierra Leone’ y ‘Gold Digger‘ no solo se llevó los Grammys a mejor canción rap y mejor solo de rap, respectivamente, sino que obtuvo una gran popularidad entre el público que no se había acercado antes al hip hop.
Como productor recibió nominaciones por su trabajo con Alicia Keys, por The Diary of Alicia Keys; con Mariah Carrey por su The Emancipation of Mimi; y por esa obra a cuatro manos con Jay-Z que es el celebrado The Carter III. Aunque no se llevó el premio por ninguno de los tres esfuerzos, la crítica y el público los arroparon.
Con ‘American Boy‘, su dueto con la inglesa Estelle, se llevó el Grammy a mejor dueto rap y su canción ‘Stronger’, que samplea una canción de Daft Punk, ganó como mejor solo de rap. Disco tras disco, West ha sido reconocido con nominaciones para el Grammy, pero hacía casi una década que no ganaba. Su energía ya no parecía estar dirigida a impresionar jurados.
Aunque se ha llevado elogios en casi todas sus aventuras creativas, los últimos años han sido caóticos para el rapero. Su matrimonio y posterior divorcio de Kim Kardashian, su campaña fallida por la presidencia de Estados Unidos, y otros escándalos, habían empañado su carrera musical.
Gracias al premio a Jesus Is King Kanye se convierte en el artista hip hop más laureado por la Academia de Grabación.