Este #8M Warp celebra a las mujeres en todos sus ámbitos. Uno de nuestros espacios favoritos es la gastronomía y por eso en este Día de la Mujer queremos compartir con ustedes esta lista de las chefs mexicanas que nos encantan.
Del sazón casero al eclecticismo; de la panadería a la comida de mar; de las defensoras de la justicia social a la estrella Michelin. Todas diversas, todas talentosas y exitosas. Así son nuestras chefs predilectas:
La chef Adria Marina Montaño es orgullosamente tijuanense. Puede ir y disfrutar una cerveza en un barecito local, o ir a restaurantes alta gama. Ese ir de aquí a allá se refleja en su cocina, que ella define como la mezcla: usar un ingrediente coreano y sazonarlo con uno mexicano; combinar el sabor de casa con las recetas clásicas y convertirlas en un platillo totalmente nuevo.
Sus restaurantes Don Ramen, Azarosa y Georgina son unos de los más celebrados del mundillo gastronómico mexicano contemporáneo.
https://www.instagram.com/adriamarina/
Ha trabajado en varios de los mejores restaurantes del mundo: Noma, Pujol y Mugaritz. Por si eso no bastara para atestiguar su gran talento, Karime López es la primera chef mexicana en tener un estrella Michelin.
Oriunda de la Ciudad de México, su trabajo en Gucci Osteria, de Massimo Bottura, le hizo acreedora del estelar galardón en el 2020. De ella dice Bottura: “Sonríe poco y trabaja mucho. Su conocimiento de la cocina italiana desafía la tradición y sus platillos tienen un acento irónico que transforman los clásicos”.
https://www.gucci.com/es/es/store/osteria-bottura
Como sucede con muchos de los grandes chefs, Daniel Soto Innes creció viendo cocinar a su abuela, que era duela de una panadería. Aunque nacida en la Ciudad de México, desde los 12 años vive en Estados Unidos, donde se hizo chef. Ha trabajado en restaurantes como Nicos y Pujol, donde conoció a Enrique Olvera. Con Olvera creó Cosme, el restaurante mexicano que The New York Times ha considerado el mejor de Nueva York.
En 2019 Soto Innes ganó el premio a la mejor chef del mundo otorgado por The World’s 50 Best Restaurants, así como el James Beard al mejor chef revelación. ¿Impresionante? Y apenas alcanza los 30 años de edad.
https://www.cosmenyc.com/
Una experiencia completa sentarse a la mesa del Rosetta, el mejor restaurante de la colonia Roma, en la Ciudad de México: es el ambiente cuidado dentro de un edificio porfiriano. Es la comida, sí, pero también la experiencia de estar en un lugar al mismo tiempo familiar y lujoso. Eso puede saborearse también en la Panadería Rosetta, que siempre está abarrotada por sus deliciosas recetas de bizcochería.
Y la genio detrás es Elena Reygadas, considerada en 2014 como la mejor chef de América Latina. Ganadora del Veuve Clicquot, Reyganas, junto a Rosetta, el restaurante y la panadería, ya tiene otros dos sitios donde se puede atestiguar su buena mano: el Café Nin y el restaurante Lardo.
http://www.rosetta.com.mx/
Con influencia de la panadería y confección dulce francesa, Sofía Cortina fue premiada en 2020 como la mejor repostera de Latinoamérica. En el Hotel Carlota de la Ciudad de México pueden probarse sus creaciones dulces, como el helado de aguacate y los vacherines de tuna y nopal.
Ama lo dulce, sí, pero también lo saludable. Su política en la cocina: sin azúcar añadida. El sabor dulce natural del ingrediente debe ser respetado. Actualmente trabaja también en la ciudad de Mérida, Yucatán, donde en el café Te extraño, extraño deleita paladares golosos.
https://teextranoextrano.mx/
Quizá la chef mexicana mejor conocida por el gran público (puesto que ha tenido programas de televisión), Mónica Patiño tiene una formación eclética: por un lado francesa (estudió en L’Ecole de Cuisine La Varenne y en Lenôtre) y por otro lado asiática, pues como chef joven trabajó y estudió en Tailandia. Pero ambas educaciones no serían nada sin su acento en la comida mexicana tradicional, a la que le da un toque contemporáneo, y sí, delicioso.
En La Taberna del León, Casa Virginia y Delirio pueden saborearse sus creaciones, que invitan a toda la familia a compartir en un ambiente cálido y que tiene siempre comida de temporada.
https://delirio.mx/
Dulce Patria es un restaurante que combina la tradición con la nueva escuela. Su chef, Martha Ortiz ama la tradición y la historia mexicana. Su principal objetivo es compartir las sensaciones y bellezas de nuestra comida combinada con técnicas de vanguardia.
Ama los contrastes: por un lado la comida lujosa, potente, y por el otro sabores conocidos y cálidos. Todo usando siempre ingredientes locales y con arraigo mexicano.
https://marthaortiz.mx/
Hacer mariscos no es fácil en una ciudad como la Ciudad de México, donde abundan las cevicherías populares pero no los grandes restaurantes de frutos del mar.
Eso cambió en 1998 cuando entró en escena Gabriela Cámara con su restaurante Contramar. Aprobado por el paladar exigente de la historiadora y crítica gastronómica Diana Kennedy, Contramar es, sin duda, el mejor restaurantes de nuestro país
Por si eso no fuera ya un logro, Cámara fundó en la ciudad de San Francisco en EEUU el restaurante Cala, con la siguiente directriz: todos los trabajadores tienen que ser personas que estuvieron en prisión. Por esa lucha de justicia social, la revista Time consideró a la chef Cámara como una de las 100 personas más influyentes del mundo.
http://www.contramar.com.mx/
En 1999 la chef Solange Muris fue a Ensenada, Baja California a enamorarse. No solo de su esposo, el también chef Benito Molina, sino también de las posibilidades que dan el suelo y el clima de Ensenada: el de mezclar sabores e ingredientes mediterráneos y darles un acento mexicano.
En Manzanilla, el restaurante que dirige desde hace 21 años, ejerce la escuela de la BajaMed, esa combinación que la tierra de Ensenada, noble, dota a su cocina.
Nacida en Sonora, la chef Sheyla Alvarado llegó a Ensenada a estudiar la carrera de gastronomía y ya no se fue. En cocinas como la de La contra, el hotel Encuentro Guadalupe y la del restaurante Latitud32 fue formándose como una jefa de cocina refinada y sólida.
A TrasLomita, uno de los mejores restaurantes de la pujante escena gastronómica de Baja California, llegó como sous chef y en 2016 se convirtió en la chef ejecutiva, con tan solo 26 años de edad. Su estilo característico: la comida a la leña.
Impulsora enérgica de la gastronomía mexicana. Maestra de cocina. Escritora. La chef Colibrí Jiménez es muchas cosas, pero sobre todo es una algo: una amante sin tregua de la comida hecha desde las cocinas más íntimas, las de las tradicionales familias mexicanas.
Tiene una iniciativa social: la de enseñar cocina en zonas rurales. El fin es que las comunidades más pobres y marginadas del país promuevan sus productos locales y se logre una cadena virtuosa entre los agricultores, distribuidores, empresarios y cocineros. Su trabajo en Oaxaca, Chiapas y Veracruz ha sido destacado por la prensa internacional.