A propósito de #WallStreetBets: seis piezas narrativas para acompañar la rebelión

// Por: Concepción Moreno

vie 29 enero, 2021

El caso GameStop ha sido una locura emocionante en estos días de malas noticias. Atestiguar esta historia en tiempo real ha sido como ver una gran película con ovación al final.

Todo lo que ha sucedido con el caso GameStop (también conocido como #WallStreetBets, por el grupo de Reddit del cual surgió toda esta verdadera revuelta financiera y social) proviene de un grupo de personas comunes que le plantaron cara a los poderes fácticos y se salieron con la suya. El tema es típico en el rock y la cultura popular toda.

The man vs. The Man. ‘El man’ en minúsculas: todo aquel que busca la revancha contra un statu quo en el que quien lleva las riendas obtiene siempre la mayor parte del pastel. Que por una deliciosa vez triunfe la gente de abajo es algo glorioso de atestiguar.

La lista que nos inspiró #WallStreetBets

El arte, sin duda, es un modo de sublimar la rebelión y la siguiente es una breve (pero sustanciosa) lista de obras con las que queremos rendirle honores a #WallStreetBets . Celebremos con estos artistas a las personas comunes que se enfrentan al poder… y ganan.

‘The Hand That Feeds’ , NIN

Mientras todos leíamos las noticias del caso GameStop era imposible no jammear en nuestra cabeza con ‘The Hand that Feeds’, canción que invita a la revolución. Sencillo del disco With Teeth de Nine Inch Nails, es el hit pop de la banda de Trent Reznor cuyo mensaje es muy potente: ¿morderás la mano que te da de comer para levantarte contra la injusticia?

 

 

La noche de la usina, Eduardo Sacheri

Argentina, 2001.  Una nueva crisis económica ha dejado sin blanca a los argentinos. Los bancos, inmovilizados, el efectivo, inexistente. Un grupo de amigos deciden que no van a dejar que el estado de las cosas se los trague. Pergeñan una estafa maestra al Estado. ¿Se saldrán con la suya?

La novela de Eduardo Shacheri ganó el Premio Alfaguara en 2016 y es la mejor del autor de El secreto de sus ojos. En 2019 fue llevada al cine como La odisea de los giles.

Glengarry Glen Rose, David Mamet

Obra de teatro y galardonada película, Glengarry Glen Rose narra la historia de un grupo de perdedores trabajan en una empresa de bienes raíces caída en desgracia. Surge un reto: el que logre vender más propiedades se gana un Cadillac. El que venda menos será despedido. La historia sigue a los vendedores luchando entre ellos, hasta que se dan cuenta que el verdadero enemigo no son sus colegas. Inolvidable la escena en la que Alec Baldwin les pone las cosas claras a los vendedores.

 

El Hombre Tanque

Una de las imágenes más conmovedoras del siglo XX es la el Tank Man, o el Rebelde Desconocido.  La escena sucede en las manifestaciones de 1989 en la Plaza de Tianamen, China: estudiantes y activistas (así como personas comunes) piden democracia. Les contestan con plomo y tanques de guerra.

Frente a uno de esos tanques, un héroe desconocido, un hombre delgado que no mide más allá de 1.80, se para y le corta el paso. El acto de valor quedó plasmado en un video y varias fotografías. Si quieren una imagen que ilustre el levantamiento frente al poder y la injustica aunque se lleve todas las perder, no busquen más: es esta.

https://www.youtube.com/watch?v=qq8zFLIftGk

The Future Bites, Steven Wilson

Wilson a toda su potencia. El músico dedicó una serie obras, entre ellas una ‘guerrilla campaign’ que incluye una página, perfiles en redes sociales, cortometrajes así como una tienda de moda ficticia que da título al álbum. The Future Bites sigue a un grupo de consumidores que se enfrentan a una marca de moda que es el corporativo que domina al mundo en el año 2032. ‘Personal Shopper’, el sencillo, es una canción cósmica que se burla del poder que tienen las marcas sobre todos nosotros.

   Lift Your Skinny Fist Like Antennas to Heaven, Godspeed You! Black Emperor

GY!BE hace este disco conceptual como una sátira de los activistas que quieren enfrentarse al poder y acaban cooptados por él.  El post-rock de GY!BE vibra recordándonos que es mejor ser un rebelde que levanta su puños en vez de ser un niño que recibe todos los golpes sin siquiera llorar.