// Por: Oscar Adame

lun 2 noviembre, 2020

Por: Mixar Lopez

El pasado viernes, el productor de música electrónica Pepe Mogt estrenó su segundo material de estudio como solista Maija Awi (2020). Se trata de una experiencia mitológica en el cual da pie al relato de la serpiente de la sabiduría, quien vivió en el mar y otorgó conocimiento a los antiguos pobladores de la península de Baja California. 

Este material es un goce sonoro. Una forma de esparcirse y diversificarse. Además de una manera de salvarse del orden natural de la música de gran consumo. En él, Pepe vuelve a usar los símbolos y sonidos autóctonos de Baja California. Los símbolos reales que le permiten ver, escuchar y producir la música más amable y esclarecedora.

Tijuana, un cuestionario

¿Cuáles son los recuerdos de tu niñez en Tijuana, que más permean en tu música?

Las marimbas de la Avenida Revolución, el carrito de las nieves o “Frosty” que tocaba el tema de “Pop Corn” de Gershon Kingsley.

¿Qué es lo verdaderamente surreal de esta ciudad?

Que se haya dado el fenómeno Narcojunior en los 80’s.

¿Cómo nace dogmáticamente ‘Fussible’ y cuál es su referente?

Este es un proyecto que armé con mi compañero Melo Ruiz, quien fue la mitad de ‘Fussible’ hasta 2004, y quien lo bautizó así por ser un componente electrónico.

El artista quiere crear su mentira y establece su verdad, decía Ramón Gómez de la Serna (1888-1963). ¿Cuál es la verdad de Pepe Mogt?

Walter Palter dijo: “Todo arte aspira a la condición de música” y esa es una verdad para mí.

¿Hacer música en Tijuana es un acto de supervivencia?

Pues en mi caso, comencé desde pequeño y tuve que trabajar en diferentes empleos, en su mayoría ajenos a la música para poder comprar equipo. Una vez me equipé, dejé de trabajar para siempre; lo de ahora es un disfrute constante y a veces cae algo de dinero para los gastos, y por fortuna ha sido así desde hace 20 años.

¿Llega un momento en que aspiramos a componer algo peor?

Todo lo contrario.

¿De qué manera la música –como arte útil–, ayuda a las personas?

La música, al escucharla la hacemos propia. Con ella se injertan memorias que a veces quedan en la mente toda la vida, y produce un placer a veces hasta mejor que el sexo.

¿Si es que hay un hilo conductor entre todas tus colaboraciones musicales, cuál sería? 

Creatividad y compromiso.

¿Cómo fue tu noche oscura del alma?

Las noches oscuras me pueden inspirar a componer.

¿Cuál es la verdadera esencia de Pepe Mogt?

Música hecha con electricidad y corazón muy humano.

Maija Awi es la serpiente de la sabiduría, una deidad reptil que vivió en el mar y otorgó conocimiento a los antiguos pobladores de la península de Baja California. ¿Por qué nombrar así a tu segundo álbum de estudio como solista, después de ‘Cuatro Cuarenta’ (2018)?

Me invitaron a realizar un concierto en Campo Alaska para una película documental a cargo del colectivo ‘Tesoro y Ejival’, donde la temática era esta serpiente. Me conecté con la historia, y así salió la música.

¿Es ahora Pepe Mogt una persona mucho más espiritual?

Siento que soy una persona muy balanceada en mi vida, y eso no me ha llevado a perder el piso, algo que ocurre mucho en este rubro.

Tu atuendo y personalidad me recuerdan al del Alquimista, en la película ‘La Montaña Sagrada‘ (1975), de Alejandro Jodorowsky, ¿hay algo de ello? 

Mi vestimenta se va dando sola, no me inspiro en personajes, creo que mi personaje ha ido mutando a través del tiempo.

¿Cómo se desprende ‘Maija Awi’, de la instalación visual que desarrollaste para un concierto realizado durante este verano en Campo Alaska (La Rumorosa, Baja California)?

La instalación nos lleva a recorrer audiovisualmente este mito, una simbiosis de naturaleza y electricidad.

¿Cómo desarrollaste estos visuales?

Con Ernesto Aello es con quien trabajé estos visuales, y se transmitieran en tres monolitos que instalamos en Campo Alaska.

¿Según tu percepción, a qué suena ‘Maija Awi’?

A la sonaja que utilizan para sus cantos los pueblos originarios de las Californias.

¿De qué manera invitarías a los escuchas a visitar ‘Maija Awi’? 

De principio a fin y con unos audífonos.