La marca de whiskey FEW anunció esta mañana que empezará a vender la bebida oficial de la icónica agrupación de grunge Alice in Chains. Se trata de un bourbon llamado All Secret Known en homenaje a la canción de la banda del mismo nombre del 2009 que fue reposado durante seis meses en barriles de tequila.
La bebida carga con 101 grados de alcohol. El líquido es color rojo cobre y presume de una botella diseñada por Justin Helton que mantiene intacto al imaginario del proyecto musical, icónico en su representación violenta de los cuentos de hadas. De acuerdo a él, la boca con un ojo que funge como la imagen principal de la botella es “una escena que nos dice que todo lo que es visto, termina siendo hablado”.
Por otro lado, el grado de involucramiento de la banda en la realización de esta bebida es desconocido. Aunque pudieron ser como Metallica, cuyos miembros se educaron en relación a la producción de whiskey previo al lanzamiento de su botella titulada Blackened, también es posible que los músicos de Alice In Chains solo hayan permitido que impriman su nombre sobre el producto. De cualquier forma, FEW promete que es un whiskey de primer nivel que vale cada centavo de su precio de $75 dólares norteamericanos que puedes comprar aquí.
La agrupación formada en 1987 por Jerry Cantrell, Layne Stanley, Mike Starr y Sean Kinney, ha contado con una de las historias más exitosas, aunque problemáticas, de la historia del rock.
En un principio una banda de glam, Alice in Chains ganó fama a finales de los años 80 por un estilo de rock pesado con reminiscencias del trash metal, el hard rock y el rock alternativo de agrupaciones como Hüsker Dü y Pixies. Esta combinación los convirtió en uno de los precursores del grunge y del alternative metal.
Sus primeros dos discos fueron lanzados en el momento más importante para el grunge, tanto en ventas como en impacto cultural. Facelift (1990), Dirt (1992), Alice in Chains (1995), y su Ep acústico Jar Of Flies (1993), debutaron en el #1 de las listas de éxitos de los Estados Unidos. A lo largo de estos años fueron considerados como uno de los cuatro grandes del movimiento musical de Seattle, junto a Pearl Jam, Nirvana y Soundgarden.
Sin embargo, el éxito derivó en problemas grandes de drogadicción por parte de sus integrantes, lo cual escaló en la muerte de Mike en un inicio y después de su icónico vocalista Layne Staley. El legado de su cantante principal no puede ignorarse, es una de las voces más impresionantes de su generación, razón por la cual la banda decidió no continuar.
Fue hasta el 2008 cuando Cantrell decidió darle una nueva oportunidad al proyecto, con la integración de William DuVall en la voz principal. Mancuerna que ha dado dos discos muy bien recibidos Black Gives Way To Blue (2009) yThe Devil Put Dinosaurs Here (2013).