// Por: Oscar Adame

jue 28 mayo, 2020

Fotos: ATP

La ciudad de Minneapolis, Minesota, se ha convertido en un lugar sin ley en donde la policía perdió toda injerencia y control sobre las protestas que la tienen como el centro de discusión. Ahora mismo, miles de personas continúan marchando por la comunidad estadounidense, en medio de edificios incendiados, tiendas completamente saqueadas y enfrentamientos entre los protestantes y aquellos ciudadanos que están en contra de la protesta.

Así pues, los manifestantes han declarado que no pararán hasta que llegue la justicia para un hombre afroamericano de 46 llamado George Floyd, quien fue asesinado por un policía del estado por nada. En una colección de videos, podemos ver que fue detenido sin ningún cargo concreto, a lo cual él no mostró resistencia y aun así el oficial al mando lo somete por el cuello, inmovilizándolo con su rodilla por poco más de cinco minutos hasta que muere de asfixia.

Tanto protestantes, como el Alcalde de Minneapolis, Jacob Frey, así como docenas de senadores estadounidense, tienen en claro que a los cuatro oficiales involucrados en el asesinato se les tienen que aplicar cargos de homicidio. Sin embargo, esto aun no ha sucedido, aunque ya se garantizó que el FBI está trabajando en el caso.

Sin justicia, no hay paz… no puedo respirar

Aunque los videos del asesinato son fuertes, George Floyd dio la consigna de la protesta a la par que se desvanecía, siendo el lema “I Cant’ Breathe’ la frase perfecta para describir la frustración de una sociedad enardecida por la corrupción y la falta de humanidad de estos policías. Es tal el sentir que incluso la Universidad de Minnessota compartió un comunicado en el cual aseguran que no colaborarán en nada con la policía con tal de mantener a su comunidad sana y lejos de peligros.

Ese es el sentir general de la ciudad, misma que se ha atiborrado a destrozar incontables patrullas, incendiar comisarías, tiendas alrededor de las comisarías y saquear los alrededores para ser escuchada.

Aunque la policía ha querido dispersar a los protestantes con gas lacrimógeno, agua a presión y balas de goma, los intentos han sido en vano, normalmente son recibidos por personas que les gritan el crimen cometido a Floyd previo a recibir piedras y golpes.

Lo más peligroso ha sido el involucramiento de otros ciudadanos, hombres y mujeres en contra de la protesta que se les ha podido ver paseando con armas de gran envergadura a lo largo de la ciudad, diciendo que están cuidando tiendas. Incluso hay grabaciones de una chica tratando de apuñalar a la gente dentro con una pequeña navaja. Comfrontamientos que han convertido a esta marcha pacífica, en un tormento peligroso, por lo que algunos medios ya están confirmando que se tiene por lo menos un saldo de un muerto.