El Instituto Politécnico Nacional (IPN) contribuye al tratamiento de diversos padecimientos autoinmunes, infecciosos, crónico-degenerativos y respiratorios mediante el Transferón, fármaco que pretende ser empleado como auxiliar en el tratamiento de pacientes con COVID-19.
Este producto ha sido la base para encontrar un tratamiento contra el coronavirus y así reducir el riesgo para personas que padecen de este virus. Las evidencias clínicas han demostrado una disminución significativa de la sintomatología en otro tipo de enfermedades que son virales, de ahí la premisa que pueda suceder lo mismo contra el COVID-19.
A finales de los años setenta, investigadores del Instituto Politécnico Nacional iniciaron un proyecto para desarrollar un producto que fortalecida el sistema inmunológico. Luego de varios años, generaron un agente capaz de estimular las defensas del cuerpo humano. Se trata del Transferón o Factor de Transferencia, un extracto dializado de células sanguíneas llamadas leucocitos.
Actualmente, La Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional (ENCB-IPN), es la única institución autorizada para la fabricación de este producto. El proyecto es autosustentable, pero además es financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).
De acuerdo con la información que ha publicado el Instituto, el producto “tiene como principio activo al extracto dializable de leucocitos (células sanguíneas), el cual se obtiene a partir de leucocitos de personas sanas y es un producto cien por ciento politécnico, cuya actividad principal es modular la respuesta inmune del organismo, ya que puede incrementarla o reducirla, de acuerdo al padecimiento en el cual se aplique”.
Dado que el Factor de Transferencia ha alcanzado cierto nivel de popularidad en estos tiempos donde la incertidumbre impera y se busca agilizar y concluir el confinamiento, ha destacado la oferta del producto a través de distintas vías de compra venta. Al respecto, la Doctora Mayra Pérez, Directora Ejecutiva de la Unidad de Investigación, Desarrollo e Innovación Médica y Biotecnológica (UDIMEB) de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) precisó que se trata de productos clandestinos con alto grado de peligro si son ingeridos o inyectados para el cuerpo humano.
En entrevista con Alejandro Franco para WFM de W-Radio, la doctora y directora del Proyecto ‘Factor de Transferencia’ explicó que sólo el IPN cuenta con la patente de dicho fármaco:
“El término factor de transferencia se está usando de una manera arbitraria para muchos productos que están en la clandestinidad, y quiero ser bien puntual en eso. El único producto que cumple con los requisitos regulatorios, el único producto que es un extracto, un biológico y el único producto que está siendo evaluado de manera internacional y de manera nacional es el producto del Politécnico. No hay ningún otro”.
Si bien la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFERPIS) ha dado permisos para que productos de Factor de Transferencia sean vendidos en México, la única institución que cuenta con la validez oficial es el Instituto Politécnico Nacional.
“Éste tiene los más altos controles de calidad, es un producto farmacéutico validado realizado por expertos y con toda la experiencia del mundo. En ninguna otra parte, ni productos de hospital, ni otros fabricantes de estos pseudo-productos tienen la calidad del instituto. Sí quería hacer la precisión porque la gente puede confundirse. Desafortunadamente este tipo de productos se anuncian en televisión, se anuncian en redes, inclusive hasta ocupando el término institucional y el nombre del Instituto sin ser productos del instituto. Hay que hacer muy clara la precisión”.
Asimismo, la Doctora detalló que el proceso de obtención del Factor de Transferencia, fármaco que sólo es útil para afecciones en las que se involucran alteraciones de la respuesta inmune, es a través del IPN. No hay otra vía.
“El Instituto tiene un compromiso muy profundo con la sociedad y con la calidad de los productos que fabrica; hemos llevado 10 años de procesos regulatorios, una plática cercana con instancias regulatorias, un reconocimiento serio de la investigación que se hace en el Instituto y es bien importante que la gente sepa que solamente el IPN tiene las bases científicas y técnicas de su producto.
México está corriendo actualmente 15 protocolos clínicos en COVID-19, sin embargo, el único desarrollo mexicano que tiene certificación en medical drive es el Transferón del IPN. Ningún otro fármaco mexicano se está corriendo. No es cierto que haya otros productos. Por favor que la gente sepa que no se puede inyectar productos que sean Pseudo-Factor de Transferencia. Es peligrosísimo para su salud y lo tienen que saber”.