Con motivo de celebración de su cumpleaños número 40, Win Butler, vocalista y líder de la agrupación canadiense Arcade Fire, anunció que el proyecto está trabajando en un próximo álbum de estudio, el cual romperá con un silencio creativo de tres años tras la publicación de Everything Now (2017).
Al respecto, declaró que tras el confinamiento han estado haciendo grabaciones constantes, pero que el proceso creativo del álbum ya se había trabajado desde hace un par de años. Sin, embargo, no habían avanzado tanto hasta que se sucitó la pandemia, lo cual ha facilitado la escritura de las líricas e intensificado los últimos detalles de la composición.
“Habíamos estado explorando un montón de temas líricos y musicales que se sienten casi inquietantemente relacionados con lo que está sucediendo ahora (de hecho tenemos una canción llamada ‘Age of Anxiety’ escrita hace un año”, declaró a través de su cuenta de IG, agregando que hoy más que nunca parece que la música “nunca se ha sentido más esencial, espiritual e irremplazable”.
Lanzado el 14 de septiembre del 2004 gracias a Merge Records, Funeral (2004) fue un éxito sin precedentes dentro de la industria canadiense. La banda ya había estado haciendo ruido gracias a su primer EP homónimo lanzado un año antes, un material de cuatro canciones que hizo que varios bloggers y músicos estuvieran al tanto de su talento, pero pese a ello nadie esperaba que los hermanos Butler lanzaran un disco de tal importancia y calibre.
La mayor parte de Funeral (2004) trata sobre la muerte, haciéndolo más bien de una forma optimista que de un modo lóbrego, oscuro o depresivo, y la enfermedad, además de abordar otros temas como el fin de la infancia y la inminente llegada de la madurez. Un capítulo imprescindible para comprenderlo fue la muerte del abuelo de los Butler en febrero del mismo año.
En su lanzamiento varias publicaciones lo llamaron un ‘clásico instantáneo’ y obtuvo calificaciones perfectas en revistas como AllMusic, Blender, The Guardian y Pitchfork. Terminando la década pasada fue registrado como el segundo disco con más apariciones en las listas de los mejores 10 álbumes de la década, sólo detrás de Kid A (2000) de Radiohead.