Después de meses de especulación, hoy renuncia oficialmente la Primer Ministro británica, Theresa May. Esto como una consecuencia directa del fracaso alrededor de Brexit.
El anuncio llegó en un momento emocional y después de meses de pelear por, no solo un plan de Brexit, pero por un acuerdo en tiempos tumultuosos. Mientras que se desarrolla la historia de esta renuncia, los medios ya se preguntan quién será el posible nuevo líder que tendrá que cargar con la responsabilidad de esta salida de la Unión Europea.
Aunque muchos pidieron por la renuncia de May ante lo que se percibe como una ineptitud total frente al Brexit, esto no hace más que agudizar la crisis que se vive en Gran Bretaña.
May declaró renunciar como líder del Partido Conservador el 7 de junio.
“Pronto dejaré de ocupar el puesto cuyo ejercicio ha sido el honor de mi vida” […] “No lo hago con resentimiento, sino con una enorme y permanente gratitud por haber tenido la oportunidad de servir al país que amo”.
Mientras que sigue pendiente llegar a un acuerdo parlamentario sobre la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, para evitar una salida súbita, el líder opositor del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, continúa exigiendo ante may “dejar que la gente decida el futuro” del país.
Se especula que el sucesor favorito para reemplazar a May, está en Boris Johnson, la cara del movimiento a favor de Brexit en 2016. Esto también se presenta como problemático, debido que a pesar de su popularidad, se considera que el candidato presentará las mismas trabas a un proceso eficiente dada su inexperiencia y radicalidad.
Lo que es cierto es que mientras May se prepara para salir, muchos de los parlamentarios conservadores buscan agilizar este proceso para salir de este retraso del Brexit.
“Necesitamos un nuevo primer ministro lo antes posible y quien sea decidirá el futuro de nuestra democracia, nuestro país y el Partido Conservador” Andrew Bridgen, legislador a favor de Brexit.