// Por: Diego Galán

jue 17 enero, 2019

Ayer, la Primer Ministro del Reino Unido y líder del Partido Conservador, Theresa May, sobrevivió el voto de “no confianza” de parte del parlamento británico por un estrecho margen de 19 votos. Uno iniciado por el líder de la oposición Jeremy Corbyn, líder del Partido Laborista.

De haber sido exitoso, este voto usado como medida de emergencia ante el caos que sumerge del Brexit hubiera iniciado un proceso de salida de May del poder para la introducción de elecciones generales en Gran Bretaña. Ate la noticia de la derrota apabullante del acuerdo de May con la Unión Europea para Brexit y ahora sobreviviendo esta moción de “no confianza”, muchos sitúan al Reino Unido en una posición más que complicada, una que tiene a diferentes analistas tratando de apuntar hacia los posibles resultados de la problemática salida de Gran Bretaña de la Unión Europea.

Paul Stokes, escritor y locutor independiente, nativo de Londres, Inglaterra explica a profundidad el contexto en el que actualmente viven los británicos y el verdadero peso de este proceso. Él es un escritor enfocado en música y cultura, que ha fungido como editor en las revistas Q Magazine y MOJO, además de ser colaborador de medios como NME, The Guardian, The Times, BBC News, WARP, entre otros. Un periodista con gran experiencia en periodismo digital creando contenido escrito, de video y audio como también administrando redes sociales para encontrar nuevas soluciones en la creación de marca. 

En exclusiva para WARP, sus observaciones sobre el actual estado de Brexit y Theresa May.

Rebelión interna

“Theresa May, la Primer Ministro británica perdió en el Parlamento por más de 200 votos, lo que significa que las personas que están de su lado, los parlamentarios que deben apoyarla y respaldar su acuerdo para abandonar la UE, se volvieron en su contra. Todo esto comenzó hace dos años a partir del referéndum [donde se decidió salir de la UE].

May, declaró el Artículo 50, que es el mecanismo utilizado por cualquier país que es miembro de la UE en búsqueda de salirse. Este establece un período de dos años en el que se negocian todos los cabos sueltos […] y las cosas que tienes que resolver, como el pago de los salarios de las personas que trabajan en la UE y los compromisos para proyectos a nivel europeo […]”

Stokes explica que a partir del referéndum, se empezaron a establecer negociaciones de pago y acerca de qué relación tendría UE con Gran Bretaña ante su salida. Un acuerdo donde mucha gente que deseaba salir, argumentó que el país obtendrá todos los beneficios de este tipo de membresía, sin estar en la UE, al tener una fuerte economía y no tener que pagar a la UE por ser miembro. Stokes continua “Como era de esperar, las cosas dieron la vuelta y la UE fue bastante dura con su posición de negociación.”

“Además de esto, Theresa May es una “Remainer” que luego se convirtió en la líder del partido conservador, después de que David Cameron renunciara, se ha comprometido a ver Brexit pasar. De alguna manera cambio de lados y se convirtió en una líder devota [del partido conservador] porque realmente quiere cumplir con esto el acuerdo, como lo ve ella, una promesa que le hizo al pueblo británico cuando se convierto en Primer Ministro. Todo a pesar de que no es lo que recomendó al país.”

Detrás de la derrota

Theresa May tuvo que hacer que el Parlamento aprobara y votará a favor de este acuerdo [de salida de la UE] y prometió un voto significativo inmediato. Uno de los grandes problemas para May, viene desde hace un par de años, donde a ella le estaba yendo tan bien en las encuestas que, en lugar de esperar, pensó tener una mayoría mucho mayor y simplemente pensó que podía hacer lo que quería. Desafortunadamente para ella no fue el caso.

Mucha gente, en el lado “Remain” voto tácticamente, pensando asegurar que las multitudes de oposición obtuvieron más parlamentarios, los Tories [conservadores] obtuvieron mucho menos, así que en realidad Theresa May pasó de una posición de bastante poder a una posición en la que no lo tiene. Peor aún para ella, ahora tiene varias facciones peleando dentro de su partido. Lo que básicamente significa que si todos los que no son conservadores votaran en contra [y dentro de su minoría hay conflicto] ella perdería.”

Cómo Stokes describe, lo que llevó a este apabullante derrota en el acuerdo de Brexit diseñado por Theresa May, ante la Casa de los Comunes, viene por una conjunción de personajes que terminan por crear un enorme grupo.

“Esta extraña colección de personas que están desesperadas por permanecer en la UE y desesperadas por abandonar la UE votaron [todos] en contra del gobierno para infligir la mayor derrota en un gobierno en función para una política emblemática. Esto no tiene precedentes en la política británica. Realmente no ha sucedió antes, no con una mayoría tan grande. Brexit ha lanzado un hechizo extraño sobre lo que sucede en Gran Bretaña. Encima de todo May dice que aunque perdió por este gran margen, todavía hará su trato, verá si puede volver a Europa a modificarlo.”

Un voto de “no confianza”

Stokes describe cómo después de esta derrota, la oposición inició la moción de “no confianza” para tratar de quitarla de poder ante los claros fracasos.

“[…] el Partido Laborista decidió tener un voto de “no confianza”, lo que básicamente significa que si hubieran ganado la votación, podrían haber tenido un “intento” de formación en el gobierno, podríamos haber tenido una elección general y comenzado todo de nuevo. […] el Partido Laborista vio esto como su oportunidad para subir al gobierno. Piensan que los conservadores son poco populares y han hecho un verdadero desastre con este acuerdo, aunado a que la Primer Ministro no puede conseguir su acuerdo principal a través de su propios diputados. Curiosamente, las encuestas no parecen respaldar esto, a pesar de todo el caos. […] en cualquier otro Parlamento si un Primer Ministro hubiera perdido por más de 200 votos, probablemente habrían renunciado, mucho menos hubiera tenido la oportunidad llegar a un voto de “no confianza”. Sin embargo, no solo Theresa May no renunció, resolvió que continuará trabajando su versión de Brexit.”

Como todos los analistas, Stokes sabe que es difícil adivinar qué pasará ahora. Incluso cuando dentro del Artículo 50 no se describe una obligación por tener un acuerdo llegando la fecha límite el 29 de Marzo de este año. El periodista describe cómo, a pesar de esto, es en el mejor interés tanto de la UE como de Gran Bretaña llegar a un acuerdo que permita conservar ciertas estipulaciones preferenciales, que el país ha logrado a través de su historial como miembro de la Unión Europea. Esto, especialmente referente a tratados de comercio dado a la profunda relación entre ambas entidades.

Desde otra perspectiva Stokes observa “Mucha gente en el lado de “Leave”, cree que es algo bueno [la salida de estos tratados de comercio], les da la oportunidad de hacer tratos diferentes en todo el mundo en lugar de estar sujetos a Europa […]”

¿Qué pasará después?

Sobre la insistencia de May por pasar su versión del acuerdo, uno que la Primer Ministro vende como uno que unirá al país Stokes continua: “Yo diría que no lo ha logrado, que ha dividido más al país con su rencorosa retórica hacia las personas del lado de los “Remainers” y claramente no ha satisfecho a los partidarios de línea dura en su propio partido.”

May ahora propone negociar con la Cámara de los Comunes, hablando con los partidos de oposición para regresar a la UE con sugerencias para modificar su acuerdo. Pero Stokes piensa que esto llega muy tarde, ve lejana una reconsideración de esta versión del acuerdo.

“¿Qué pasa después? Como he dicho, podríamos salir abruptamente [de la UE], [May] podría conseguir un acuerdo. Hay un movimiento en Gran Bretaña por tener un segundo referéndum […] una gran cantidad de personas del lado “Remain” ven eso como la mejor oportunidad para mantener a Gran Bretaña en la UE […] sin embargo, si eso sucede quién sabe quién ganaría en esta etapa. […] posiblemente se verá la fecha límite del Artículo 50 extendida desde el 29 de marzo a más adelante en el año.”

No obstante Stokes advierte que pase lo que pase la decisión debe ser contundente “Si vamos a tener un referéndum de nuevo, debe ser la última idea, tengo la sensación de que a muchos políticos les gustaría hacer eso. Lo ponen en un callejón sin salida y dicen “no es nuestra decisión, hay que dejar que la gente decida”

Aunque, los resultados de lo que podría pasar aún son difíciles de delimitar, analistas de la situación como Stokes buscan entender todas las opciones y el porqué este desastre del Brexit ha sucedido. Los días que siguen, probarán ser de gran actividad por parte de todos los actores de la política británica con una inminente fecha límite y una enorme variedad de opiniones.

“Theresa May perdiendo por más de 200 votos en cualquier otro momento en la política británica la tendría fuera [del poder], ella sigue. Así que todas las apuestas son válidas sobre lo que sucede a continuación.”