Han pasado cuatro años desde que Renee Mooi grabó su primer álbum de estudio, un material conformado por una serie de canciones “complicadas, cabronas, ruidosas, fuertes, raras y súper rebeldes” que se ha mantenido guardada en el baúl de sus recuerdos. Un material intenso, uno que ya no significa más a una artista que cantó desde un lugar completamente distinto al cual se encuentra ahora.
“Las emociones que rigen esta música son distintas a lo que yo soy en este momento. Era otra mujer, una niña de veinte años“, me declaró. Sin embargo, el álbum tiene que salir. Aunque Renee ha aprendido muchas cosas de la vida a lo largo de estos años y no se siente cómoda con los resultados finales, el material es muy prometedor y la cantante lo sabe, aunque diga que le “incomoda oírlo“.
Será uno de los álbumes más comentados del próximo año por parte de cualquier artista mexicano. Una serie de colaboraciones de primer nivel, entre las cuales se encuentran Sandrushka Petrova de Descartes A Kant y Teri Gender Bender de Le Butcherettes, le agregan un sabor interesante a la fórmula. Si a eso le sumamos que a lo largo de todos estos años Renee Mooi se ha convertido en uno de los agentes más queridos y respetados de la industria nacional, se crea una nueva capa de interés.
Bajo una sinceridad desnuda, Renee Mooi decidió estrenar un nuevo adelanto del material en exclusiva para WARP. Una canción titulada ‘Papaya’ que compuso junto a Carmen Ruiz, pieza que sucede al caos de ‘Bees’ en una secuencia de beats digitales, bajos y sintetizadores atmosféricos. Una canción lenta que encuentra su mayor distinción en la sensual voz de Renee, quien murmura con odio una carta a todo aquello que tiene que alejar de su vida.
“Estaba muy enojada con una chava que era como una mosquita muerta. Era una dulce por fuera, pero por abajo se jodía a mucha gente”, me dijo respecto a la inspiración de la canción. “Estábamos en el estudio y yo estaba muy enojada con ella porque le estaba tirando la onda a mi novio, entonces entré al baño y le escribí la letra“, declaró, “se llama papaya porque habla de estar sentada en el baño, dando tiempo a que se limpie absolutamente todo lo que no te sirve“.
Es una canción que nació ante la desesperación de no seguirle el juego a alguien dañino, una promesa a sí misma de que no dejará que se aprovechen nunca más de ella. “La he dedicado a muchas personas desde entonces, pero inconscientemente“, afirmó, “necesito hacerlo por el camión en el que estoy, dentro del colectivo que es de mucho dar, mucha interacción y energía. Si no hay nada de regreso y si la gente no tiene valores ni principios, definitivamente prefiero no tenerlos en mi vida”.
Contrario a la canción industrial que la precede, ‘Papaya’ cuenta con una estructura mucho más trazada, con una larga introducción y puentes instrumentales repletos de sampleos a voces y risas. “Es una canción que te lleva de la mano“, afirmó Renee, reconociendo que la mayoría de las composiciones de este disco fueron creadas desde el inconsciente, “en el momento en el cual empieza a existir una canción, esta adquiere su propia personalidad y se vuelve un ente bastante independiente que va pidiendo lo que necesita. Si eres atento y escuchas, se lo puedes dar”.
El problema que tiene Renee Mooi con este material no es el trabajo en sí mismo, “musicalmente todos son unos monstruos, todos me encantan y estoy orgullosa de su sonido“, declaró, “es difícil para mí entenderlas y recordar de dónde vienen, es como si lo hubiera hecho otra persona, ha pasado bastante tiempo“. Parece ser que su distanciamiento radica en la madurez que ha alcanzado a lo largo de los últimos años, separándose por completo de la inseguridad juvenil que se mantienen implícitas en las canciones, furiosas.
“En ese momento la emoción que más me movía era el enojo. Contra mi papá que no me apoyaba en nada y el rollo social con el cual me topé al tratar de hacer rock como mujer”, declaró, afirmando que el material está repleto de colaboraciones con distintas mujeres de la industria. “Mi motivación era el demostrar, eso era lo que me movía”.
La inseguridad de Renee Mooi devino de varios problemas familiares. Como cualquier genio creativo, esta músico se encontró con varios obstáculos a lo largo de su educación debido a su naturaleza rebelde y distraída. “Yo creía que era una loca cuando estaba creciendo, pensé que estaba muy mal y que iba a sufrir mucho”, afirmó de forma seca y concisa, mostrando un alto grado de aceptación a sus etapas más obscuras.
“Algo que no me gusta de este disco es que lo siento absolutamente pretencioso, en el sentido de que tenía muchas ganas de demostrar sin hacer un proceso interno en el cual yo me estuviera disfrutando”, afirmó respecto al álbum, reconociendo que las piezas fueron construidas ante la necesidad de aceptación, por brillantes que sean. “Ahora me siento en paz, ya encontré quién soy y sé por qué hago las cosas, todos mis proyectos son más amorosos e inclusivos“, agregó, mostrando que tras varios años al fin se siente segura de lo que está haciendo.
No es ninguna decisión al azar que Renee Mooi esté lanzando sus canciones tras tanto tiempo de espera. Es un proceso de reconocimiento a su propio ser, necesario para su crecimiento espiritual y artístico. Un plan para volver a captar el ojo del público y al mismo tiempo aprender a escucharse, reconocer sus errores del pasado y superarlos en su siguiente paso.
“Ahora no sé quién soy a nivel musical, me voy a volver a sentar para conocerme desde esta nueva perspectiva sin intentar realmente nada”, declaró visualmente emocionada, “empezaré a componer de nuevo en estas vacaciones“, afirmó, rompiendo dos años de descanso creativo a favor de dedicarse al cien por ciento en Mooi Collective. “Mis nuevas canciones estarán mucho más enfocadas en explotarme como cantante”, dijo, citando a un artista israelí llamado Asaf Avidan como su principal influencia, un músico minimalista que raya en la composición académica.
“Mi fortaleza más grande es mi voz y la tengo súper abandonada, me siento cómoda como cantante, es lo que estudié y es la forma en como sano mi alma“, declaró previo a tomar su siguiente paso, uno que se visualiza aun más prometedor que el álbum polvoso que está a punto de lanzar.