Ayer dio por terminada la primera consulta ciudadana realizada por el gobierno de MORENA, una nueva modalidad liderada por el Presidente Electo, Andrés Manuel Lopez Obrador, para acercar más a los ciudadanos a las decisiones más relevantes que se tienen que hacer dentro del país.
La primera de ellas fue para decidir el futuro de uno de los proyectos más polémicos del país, el aeropuerto de Texcoco, en el cual se dieron dos opciones: La primera es continuar con la construcción del aeropuerto de Texcoco como se tenía estipulado y la segunda es construir dos pistas más en la base aérea de Santa Lucía y acondicionar los aeropuertos de CDMX y Toluca.
De acuerdo a lo comunicado por la Fundación Rosenblueth, encargados de la realización de la consulta, ganó con casi un 70% de las preferencias la opción de construir dos pistas más en la Base Aérea de Santa Lucía, re acondicionar el aeropuerto actual de la CDMX y el de Toluca.
748, 335 personas eligieron a Santa Lucía ante los 331, 132 votos que se dieron a la nueva terminal aérea dentro del lago de Texcoco. “Los resultados son definitivos“, aseguró Jesús Ramírez Cuevas, vocero de Andres Manuel López Obrador, recordando que el nuevo gobierno cumplirá con los compromisos adquiridos con las empresas y con los inversionistas que participaron en la construcción.
Sin embargo, los cuatro días que duró la consulta se vieron envueltos en fallas y polémicas debido a que la aplicación permitió que una misma persona votara hasta en cinco ocasiones. Las redes sociales debatieron respecto a la integridad y valides de la consulta debido a estos casos, aunado a las decenas de casillas inexistentes que se tenían registradas fuera de la Ciudad de México y el hecho de que zonas mayoritarias de MORENA contuvieron una mayor cantidad de votantes. Los organizadores se han excusado, declarando que estos casos fueron “marginales“.
Según los datos expuestos por la página México Decide, en ninguna de las 32 entidades ganó la opción de Texcoco. En la mayoría Santa Lucía se impuso tres contra uno.
A pocas horas de haberse dado a conocer los resultados de la consulta ciudadana, Andrés Manuel Lopez Obrador anunció en una conferencia de prensa que la obra del nuevo aeropuerto será construida sobre la base militar de Santa Lucía, obedeciendo así a lo decidido por los ciudadanos. “La decisión que tomaron los ciudadanos el día de ayer de ayer es racional, democrática y eficaz“, declaró el líder de MORENA.
Aunado a ello, declaró que las inversiones y contratos no se encuentran en riesgo y que su gobierno asumirá todas las consecuencias legales de la decisión. Además, dijo que con esta decisión el gobierno federal ahorrará $100,000 millones de pesos mexicanos.
Contrario a lo que dice Obrador, muchos economistas están preocupados ante la cancelación del aeropuerto, pues en el proyecto ya se han gastado más de $14,000 millones de dólares norteamericanos y las indemnizaciones para las empresas contratadas, cancelar el aeropuerto supondría un costo de más de 100 mil millones de pesos, más los gastos de demolición.
Por otro lado, la obra se ha visto envuelta en polémicas relacionadas a la corrupción desde que inició el proyecto. En marzo se documentó que Sedena encareció un 89% el precio de la barda e involucraron a empresas fantasma. Ese bardeado se atrasó 500 días y toda la construcción arrancó sin proyecto ejecutivo. Aunado a ello, de acuerdo a una investigación del IMCO 157 procesos de contratación fueron por adjudicación directa y otros 59 por invitación restringida.
Aunado a ello, la cancelación ha sido muy bien recibida por los sectores interesados en la ecología, pues la construcción en Texcoco suponía un impacto ecológico muy importante dentro de la zona, con la alteración casi total del Lago Sabor Carrillo, impactando negativamente el abasto de agua potable, generando un aumento en gases de invernadero y matando a miles de aves migratorias.