// Por: Oscar Adame

vie 19 octubre, 2018

Foto por: Reuters

Este viernes logró entrar una caravana de alrededor de 4,000 migrantes hondureños a territorio mexicano, tras derribar la valla del lado guatemalteco y cruzar el puente sobre el río Suchiate. Autoridades mexicanas apuntaron que varios policías resultaron lesionados y que con esta acción se rompió todo acuerdo que se tenía con el grupo migrante. 

Previo a romper la valla, la caravana coreó “los inmigrante somos criminales, somos trabajadores internacionales“. Horas antes México pidió apoyo de la ONU para procesar refugios dentro de su territorio.

Un desorden internacional

“No hemos tenido una caravana o grupo de este tamaño que solicite refugio de manera simultánea, por eso hemos solicitado el apoyo de Naciones Unidas“, dijo Videgaray a la cadena Televisa antes de la entrada de los hondureños.

Pese a que Donald Trump pidió al Gobierno Mexicano que detengan el avance de los migrantes, amenazando con “llamaré a los militares y cerraré nuestra frontera sur“, México no desvirtuó sus valores. Cuando lleguen, afirmó Luis Videgaray, se les dará “un trato humanitario porque México es un país que no cierra sus fronteras“. “Lo importante es que el ingreso se haga conforme a la ley”, mencionó.

Sin embargo, estos migrantes no entraron cómo les ha sido solicitado, sea con una visa y pasaporte, o mediante una solicitud de refugio. En su lugar se dice que tiraron piedras y golpearon a varios de los 400 policías federales que sellaron la frontera. Tras su cruce, la tensión aumentó y la policía mexicana empleó gases lacrimógenos. 

No se contuvieron las agresiones

De acuerdo a Reuters, el Comisionado General de la Policía Federal de México, Manelich Castilla, pidió que “desistan de las agresiones para proceder a un ingreso ordenado“. El Secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete, denunció que los migrantes entraron “por la fuerza” a su país y que “lastimaron” a policías mexicanos en la frontera.

Los migrantes, que aseguran huir de la pobreza y violencia en su país, continúan firmes en su empeño por llegar a Estados Unidos pese a las amenazas de Donald Trump de cerrar la frontera sur con México si la caravana sigue adelante. Además ha declarado que cortará la ayuda económica a Honduras, El Salvador y Guatemala. En conferencia de prensa el mandatario afirmo que “agradezco al gobierno mexicano por detener a estos delincuentes“.