Django Django se convirtió en la nueva banda a seguir tras el lanzamiento de su primer disco de estudio. El material homónimo del 2012 presentó a una agrupación fresca y divertida que tomó a la crítica por sorpresa con su excéntrica mezcla de géneros y vibrante imaginario.
Los blogs los convirtieron en nuevas estrellas internacionales. Eran interesantes, eran diferentes y valía la pena escucharlos. A la distancia parecía que se iban a convertir en la nueva agrupación consentida de los estudiantes universitarios, a una década de Franz Ferdinand y dos de Blur, el sarcasmo y talento para trabajar con imaginarios complejos estaba impreso en cada nota e imagen de Django Django.
El material fue nominado el Music Mercury Prize, pero después la banda se convirtió en una broma web cuando empezaron a utilizar su nombre para describir a aquellas agrupaciones que llegaron con una gran cantidad de atención y después “ya nadie supo de ellas”.
Tardaron tres años en lanzar un nuevo disco, Born Under Saturn (2015) y otros tres para Marble Skies (2018), fueron bien recibidos pese a perder la novedad. Sin embargo, su dinámica de trabajo cambió con el recientemente anunciado Winter’s Beach (2018), un EP que saldrá a la venta el próximo 12 de octubre con el cual se proponen a “crear una pieza fuertemente visual repleta de imágenes en movimiento que exploran los vibrantes mundos dentro de nuestras cabezas”.
Es por esto último que platicamos con Jimmy Dixon, bajista de la agrupación, sobre el nuevo enfoque de la banda y su primera visita a la Ciudad de México.
En el comunicado de prensa de Winter’s Beach describen que su intención es profundizar en el mundo interno con su música… ¿de qué mundo interno hablan?
El EP viene de la mano de nuestro interés por querer crear un mundo surreal en videos musicales, un lugar en el cual podamos inventar lo que queramos, como si estuviéramos en las montañas de la locura. Esas imágenes las transformamos a acordes, pensando que todas ellas son evoluciones de ideas humanas. Las mejores que tenemos, de ese mundo interno hablamos, de las ideas.
Fue una sorpresa el anuncio de este EP porque no ha pasado mucho desde el lanzamiento de su disco anterior…
Creo que cuando terminamos Marble Skies (2018) empezamos a tocar en muchos festivales para promocionarlo, pero en medio de ello nos rodeó la intención incontenible de crear varias versiones de esas mismas canciones, nos sentamos en la computadora y en su lugar nos pusimos a escribir nuevas composiciones.
Es por ello que creo que este nuevo material me tiene más emocionado, porque salió natural, me gusta la idea de haber creado algo detrás de los escenarios.
¿Por qué no esperaron a tener un disco para lanzar este material?
Nunca habíamos tenido un EP antes y creo que nos interesamos en tener uno. Además a veces trabajas en canciones cuando estás de tour, se convierten en borradores y les sumas elementos e ideas hasta tener la versión final, es un proceso lento de poco más de un año. Creímos que esta vez no queríamos eso, preferimos mostrar las ideas desnudas, desde sus inicios.
Es interesante porque justo acaban de re-estrenar los primeros EPs de The Beta Band, es una banda que se volvió famosa sólo por estos tres discos y bueno, ustedes tienen mucho que ver con la banda…
Ohh, es porque Dave es el hermano de John Maclean (líder de The Beta Band). Yo nunca fui un gran fan de la banda, los escuché varias veces, fui a un par de conciertos de ellos y eso fue todo para mí. Pero definitivamente hay una influencia directa de ese proyecto, en un sentido de producción hay elementos similares, además ambos tenemos influencias de bandas pop de los años 60 o 70.
Es una comparación bastante común, pero no creo que lo hayamos hecho de forma intencional.
Muchas personas han llegado a su banda gracias a su incursión en videojuegos como los Fifa y Grand Theft Auto. ¿Cómo te sientes al escuchar tus canciones en estos contextos?
Es divertido, no hay mucho que podamos hacer. Siempre ha habido muchas ofertas, desde que lanzamos nuestro primer disco y al principio rechazamos muchas porque no queríamos que diversas personas llegaran a nosotros por estos medios. Nosotros queremos que la gente nos descubra a través de nuestros discos, que los escuchen completos y vean el arte, creo que todo lo que hacemos es con la intención de transformarse en una experiencia propia.
Por otro lado, a veces escucharse en televisión puede transformarse en algo un poco surreal, me ha pasado que estoy en un bar y de repente se escucha una de mis canciones en un comercial del televisor. No puedo decir que me guste, pero creo que si quieres vivir de hacer música a veces tienes que ceder para seguir, es parte de lo que hacemos.
¿Alguna vez te has sorprendido mucho al escuchar una de tus canciones?
Claro, hay una película llamada I’m So Excited (2013) de Pedro Almodóvar, es una producción española de un director que es reconocido como un cineasta de arte. La estaba viendo en el cine cuando empezó a sonar ‘Skies Over Cairo’, fue muy extraño y emocionante la verdad, hasta le dije a mis padres que fueran a verla, fue surreal.
Una cita muy famosa de ustedes es que esperaban que su disco debut fuera un producto de nicho. ¿Las pretensiones y objetivos de Django Django cambiaron tras el éxito masivo que tuvo aquel álbum?
Claro, cuando pasa algo de ese estilo lo más lógico es reaccionar y a nosotros nos tomó con la guardia baja. La recepción del disco hizo que tuviéramos que cambiar un poco la forma en como tomamos el hacer música. Pero creo que no cambió nuestro estilo y nuestras pretensiones artísticas, seguimos experimentando, haciendo música extraña y creando mundos surreales y eso nunca va a cambiar.
Por otro lado, la producción empezó a centrarse un poco más en los ganchos y nuestro proceso compositivo también cambió un poco para hacer canciones mejor construidas y pegajosas. Creo que cuando tienes a tantas personas yendo a verte tienes que mantener su atención, no pudimos seguir haciendo música como cuando la presentábamos en nuestros áticos.
Nos esforzamos en hacer que nuestra música fuera mejor y pensamos que la gente ha recibido bien este empuje que hemos tenido, también tomamos cursos compositivos y trabajamos en ser mejores en nuestro acto en vivo, ser más participativos en un escenario. Aunque tampoco queremos que todo sea como en un libro.
Han tardado mucho en llegar a México, es algo raro porque aquí son bastante populares y su música tiene muchas particularidades que resuenan con esta ciudad…
Hay una historia triste, habíamos quedado en 2013 en visitar México para un festival llamado Day Of The Dead, pero los organizadores se echaron para atrás, decidieron apostar por algo menos musical. Sin embargo, siempre ha estado en nuestro radar, nos ha encantado vacacionar allá y nunca hemos ido juntos.
Estamos agradecidos de poder ir al país a divertirnos un poco y también relajados de que la primera vez que tocaremos en México no será en un festival, llevaremos el set completo y le entregaremos a nuestros fans todo por lo cual han esperado.