Uma Thurman revela su caso #MeToo mientras grababa Kill Bill

// Por: Staff

mar 6 febrero, 2018

Por: Luis Ávila

Las acusaciones contra el productor de Hollywood, Harvey Weinstein, no han parado desde del 5 de octubre del año pasado, fecha en la cual  The New York Times y The New Yorker anunciaron que más de una docena de mujeres han acusado al productor de acoso sexual. Desde entonces más de 60 actrices se han pronunciando contra Weinstein, entre las cuales destacan nombres como Salma Hayek, Angelina Jolie, Gwyneth Paltrow y Rose McGowan, entre otras. Hoy Uma Thurman se les ha unido con un par de declaraciones para The New York Times que han causado polémica.

Tras 20 años de mantener el silencio, la actriz confesó un par de episodios que involucran al productor ex-dueño de The Weinstein Company. El primero de los incidentes que habría sufrido con Weinstein tuvo lugar en un hotel de París, en el que el productor la habría pedido discutir un guion, sin embargo, la condujo a un sauna y tras un intercambio de palabras él reaccionó de manera nerviosa y furibundo salió del lugar sin alguna explicación.

Uma Thurman en Pulp Fiction (1994)

Soy una de las razones por las que alguna jovencita entraba a su habitación sola, como yo lo hice. Quentin eligió a Harvey para que fuera productor ejecutivo de Kill Bill, una película que simboliza el empoderamiento femenino, pero todas esas ovejas entraron en el matadero porque estaban convencidas de que nadie que pueda hacerte algo ilegal llega a un puesto tan alto. Eso es una mentira”, declaró la actriz.

El segundo de estos eventos habría sucedido en Londres en un hotel en el que la actriz logró escapar del acoso del productor. Thurman confrontó a Weinstein, pero él, la amenazó con hundir la carrera de la actriz.

Harvey Weinstein con Quentin Tarantino

Aunado a estas acusaciones Uma dejó en claro que también sufrió de un episodio violento por parte de Quentin Tarantino, escritor y director de los dos filmes más populares de Thurman, Kill Bill (2003-2004) y Pulp Fiction (1994), las cuales además fueron producidas por Weinstein. 

Tarantino no fue acusado de violencia sexual, si no más bien por obligarla a ponerse en peligro dentro de la filmación de la segunda parte de Kill Bill (2004). Según Thurman, él la obligó a conducir un
auto en mal estado, la actriz habría pedido que un experto condujera pero el director quería que la protagonista lo hiciera, Thurman, terminó estrellándose en una palmera y con algunas lesiones a consecuencia del impacto.

Al respecto el director declaró lo siguiente en una entrevista con Deadline: “Es uno de los mayores remordimientos de mi vida. Como director aprendes cosas y a veces aprendes a través de errores horribles. Ese fue uno de mis errores más horribles, no recorrí la carretera una vez más para comprobar el trayecto.

Quentin Tarantino con Harvey Weinstein

Además la actriz agregó que cuando se encontraba iniciando su carrera artística, a los 16 años de edad, conoció a un hombre 20 años mayor que la obligó a tener relaciones sexuales con él. “Traté de decir que no, lloré, hice todo lo que podía hacer. Me dijo que la puerta estaba cerrada con llave, pero nunca corrí y probé la perilla. Finalmente fui obediente“, contó, “cuando llegué a casa, recuerdo que me paré frente al espejo y me miré las manos y estaba enojada con ellas por no estar ensangrentadas o magulladas.

Esto es algo de lo cual seguramente se hablará en el movimiento MeToo, el cual fue creado en 2006 por la activista Tarana Burke y que retomó fuerza por todos los casos de acoso y abuso sexual que salieron a la luz en los últimos meses en Hollywood. 

Uma Thurman en Kill Bill Volúmen II (2004)