El día de ayer Aaron Joel Mitchell de 41 años decidió que sería una buena idea romper dos áreas de seguridad dentro del festival Burning Man para acercarse a la gran escultura alrededor de la cual se realiza la fiesta del evento.
Él corrió hacía la fogata aun y con la gente de seguridad persiguiéndolo durante su trayecto. Una vez llegado al Burning Man, fue imposible llegar a Mitchell por las grandes flamas que había alrededor. Lograron sacarlo tras apagar la fogata y fue llevado de emergencia en helicóptero al Davis Burn Center de California, pero se anunció que murió en la mañana de este domingo.
No ha quedado claro si Mitchell sufría de pensamientos suicidas o si sus acciones tuvieron una influencia de parte de las drogas y el alcohol. El reporte ha quedado pendiente.
A pesar del incidente, los organizadores continuaron con lo pendiente dentro del festival, incluyendo la quema del templo.