13 Reasons Why, la serie original de Netflix estrenada el 31 de marzo que narra la historia del suicidio de Hannah Baker por ser víctima de bullying, ha sido culpada de frivolizar el suicidio e incluso apoyarlo, a su vez, ha sido bien recibida por un sector de la población. Amada u odiada, hasta el momento ha estado en boca de millones de espectadores.
Después de un mes de críticas hacia la serie por “mostrar imágenes demasiado fuertes”, la productora de 13 Reasons Why, Selena Gomez, decidió hablar y defender la calidad de este formato transmitido en Netflix y en una entrevista dijo: “Nos mantuvimos apegados al libro y a lo que en un primer momento el autor Jay Asher creó, una bella historia trágica, compleja pero sin embargo hermosa. Y pienso que eso es lo que buscamos hacer; queríamos hacerle justicia y claro, las respuestas vendrían de una u otra manera. No es un tema sobre el que sea fácil hablar, pero soy muy afortunada por cómo le está yendo y me siento abrumada, estoy muy orgullosa”.
A su vez, uno de los guionistas de 13 Reasons Why, Nic Sheff, respondió previamente a la crítica de la forma en que plasma el suicidio: “Cuando llegó la hora de discutir el retrato del suicidio de la protagonista, me pareció la oportunidad perfecta para mostrar cómo es realmente un suicidio real: disipar el mito de la tranquilidad que se aleja y hacer que los espectadores se enfrenten a la realidad de lo que sucede cuando saltas de un edificio en llamas en algo mucho, mucho peor.”
La serie es objeto de debate, en especial por mostrar imágenes explícitas del suicidio de la protagonista, lo que ha llevado a grupos de prevención de suicidio y a colegios a manifestarse en su contra.
Los especialistas que trabajan con personas que tienen tendencias suicidas han expresado que el mensaje que transmite la serie es equivocado y puede propiciar que un adolescente deprimido se suicide.
¿Tú que opinas?