Aprovechando este espacio, quiero darle una grata bienvenida a todos los lectores que buscaran en esta columna semanal, una opinión personal acerca de todas las noticias, acontecimientos y temas que se concentran alrededor del séptimo arte.
Este fin de semana por fin llega de manera oficial a México, una de las películas con más Oscar Buzz de todos los tiempos y es que La La Land de Damien Chazelle, quien como muchos ya saben, fue el director de la joya musical –que por cierto también llegó tarde a México – Whiplash; además de ser un deleite musical de dos horas, cuenta con valores de producción increíbles que se hacen notar, apenas vemos la primera escena, que por cierto es un plano secuencia con canto y baile en plena carretera de Los Angeles.
La La Land, la cual por fortuna, tuve la oportunidad de ver hace un par de meses en el Festival Internacional de Morelia, es una de esas cintas que está destinada a convertirse en un básico en la historia del cine, al ser a la vez un homenaje a la era dorada de Hollywood y una propuesta que busca hacer que los musicales vuelvan a los estándares que se vieron perdidos cuando el cine comenzó a buscar nuevas fronteras.
Aquí el tema de discusión no es la calidad de La La Land, la cual es un deleite audiovisual como no se había visto hace varios años. El tema aquí recae en las dificultades que cuenta la distribución de cine no sólo en México, sino en toda Latinoamérica.
¿Cuáles son las reglas para definir la fecha de estreno de una película en nuestro país? La verdad es que esta respuesta es mucho más complicada de lo que creíamos, ya que por ejemplo, con esta película, el buzz que se ha generado en la temporada de premios, es lo que la ha convertido en una de las cintas con más hype para principios de este 2017.
Corazón Films, los encargados de la distribución, tenían planeado en principio un lanzamiento a mitades de enero, esto aún antes de que la película se estrenara comercialmente en Estados Unidos –el cual por cierto, fue un estreno limitado- pero antes de que acabara 2016, el estreno fue movido para febrero.
Con la presión que se generó a raíz de los 7 Globos de Oro que se llevó el filme hace una semanas, el estreno se movió fragmentado a este fin de semana en algunas salas y para el 3 de febrero en todo el país.
¿Cuál es el criterio de salas? Esta respuesta, de nuevo, es muy complicada, ya que podemos ver el filme en salas VIP y salas de arte, pero en salas generales llegará hasta su fecha oficial del 3 de febrero. Probablemente y en contra de lo que muchos piensan, esta sea una nueva estrategia para ganar aún más audiencia con las opiniones boca a boca, pero si de entrada el hype que se tenía ya era el suficiente para estrenar este 20 de enero ¿Por qué hacer el lanzamiento en dos partes?
La distribución siempre se basa en lo que los encargados en México piensan en alcanzar más audiencia y la verdad es que es muy complicado predecir el mercado cuando no sean días de asueto o las temporadas fuertes de verano o invierno.
Las grandes series y franquicias como las películas de Marvel, DC Comics, Transformers, Harry Potter (ahora Animales Fantásticos) suelen estrenar incluso una semana antes de su lanzamiento oficial en Estados Unidos porque es muy fácil descifrar el éxito de taquilla que vendrá de la mano de los trancazos entre Batman y Superman, pero cuando la cuestión apunta más a un drama Oscareable, la verdad es que el público mexicano decide disfrutar antes cualquier animación que escupa Dreamworks o Illumination Entertainment que ver la historia de un afroamericano que se convierte en traficante de drogas.
A pesar de que la audiencia mexicana es muy clara con el tipo de cine que prefiere ver, hay muchas ocasiones sorprendentes en el que el público abarrota salas como en el caso de La La Land que además de beneficiarse con Ryan “The Notebook” Gosling y Emma “el eterno crush” Stone, el filme destila melosidad por doquier.
Aquí es cuando al mero estilo Peña Nieto, les pregunto: ¿Qué hubieran hecho Ustedes en los zapatos de Corazón Films? ¿La hubieran estrenado en diciembre o la jugada les favoreció para abarrotar salas en enero? Así es que antes de quejarse cuando las películas nos llegan tarde o de plano no llegan, recuerden que a veces, no es culpa de la gente de la distribuidora que no tiene ni la menor idea de su target, sino que el público mexicano puede llenar salas para ver a Dominic Toretto, pero muy difícilmente va a ver un dramón protagonizado por Casey Affleck.
Así que contestando a la pregunta planteada desde un principio, decidir una fecha de estreno es como una ruleta rusa que puede jugar a favor o en contra, pero aún es un idilio que veamos el cine al mismo tiempo en México que en Estados Unidos y aún falta ver cómo se mueva la industria en los próximos 4 años con los cambios en el gobierno estadounidense.
Así que como fanático y no como distribuidor, sugeriría mover el estreno a la fecha más cercana a su lanzamiento original, no sólo para combatir la piratería, sino para crear una cartelera rica y variada semana con semana que a la vez podría hacer que el espectador promedio se “atreva” en ver una “película de arte” en lugar de disfrutar una y otra vez del blockbuster de la semana. Esto claro, con las películas que se logren distribuir en el país, ya que muchos clásicos de culto por venir, difícilmente llegarán a su cine favorito.