WARP Magazine continúa de fiesta por que cumple diez años de existencia y la noche del 18 de mayo se pudo sentir toda esta vibra de festejo. Dentro del marco de su celebración, tuvo como invitado especial al músico y productor británico James Lavelle, creador del proyecto UNKLE para compartirnos su más reciente proyecto, UNKLE Sounds en el Plaza Condesa, evento presentado por Virgin Mobile.
En este evento también participaron talentos nacionales con un sonido fresco y propositivo (aunque muy diferente entre si). Para comenzar a poner ambiente, al abrir puertas y mientras los primeros asistentes llegaban, Alejandro Franco en su faceta como DJ (SLKTR) lanzó los primeros beats para comenzar esta épica fiesta.
Posteriormente Luis Marcol con su proyecto indie-electrónico brindó una presentación relajante y etérea con sus sonidos dream pop guiados por la parte orgánica en la sonoridad de su guitarra eléctrica. Estaba acompañado del baterista Erubiel Rangel, quien hacía el complemento perfecto al percutir sonidos sampleados y electrónicos para darle unos tintes de trip hop y jugar con sonidos jazzeros pero sin perder la esencia del proyecto. Mantuvieron a quienes los vieron en una especie de trance en estado contemplativo.
AAAA, el proyecto creado en la Ciudad de México por el productor Gabo Barranco fue el encargado de comenzar a sacar chispas en los asistentes. Con una mezcla que oscilaba entre el acid, el techno y su inclasificable visión creativa, mantuvo en constante movimiento a un Plaza Condesa que ya se encontraba cada vez más lleno y preparado para el plato fuerte de la noche.
SLKTR se encargó por unos momentos más de continuar pinchando antes de que James Lavelle saliera al escenario y comenzó con su magia detrás de las tornamesas. Presentó su más reciente colaboración, llamada UNKLE Sounds, la cual realizó en conjunto con el diseñador de luces Tupac Martir y los artistas visuales Doug Foster, Warren Du Preez y Nick Thornton Jones.
En este set, mezclo canciones de UNKLE reconstruidas especialmente para la ocasión, reversionando su propio trabajo pero trasladándolo hacia un ambiente totalmente de fiesta. La gente no paró de bailar durante su set, y pese a algunos deslices y repeticiones del material, los visuales hipnóticos, el sonido cuidado del venue y el ambiente entre la gente hicieron de la velada una fiesta de cinco estrellas.
Anoche aprendimos que con cualquier cosa abstracta se puede hacer una pieza visual mágica; desde imágenes de platillos de batería, plantas, calles con un punto de vista aéreo, humo sobre un fondo negro, fuego -por mencionar algunos elementos- que terminaron en visiones kaleidoscópicas totalmente abstractas, con el fin de complementar lo que la música le hacía sentir a quienes disfrutaban de esta celebración.
Después de dos horas de una experiencia audiovisual continua, llegó el silencio y las luces se encendieron. James agradeció por la buena respuesta del público y la gente comenzó a desalojar el lugar, cuando sorpresivamente se volvieron a encender las luces y a manera de encore, Lavelle volvió al escenario para regalarnos algunos minutos extras para disfrutar.
Así se vivió otro de los festejos por la primer década de vida de WARP Magazine, como también sucedió con nuestra proyección de Birdman con Antonio Sánchez tocando el soundtrack de la película en vivo.