Hoy se cumplen 33 años del lanzamiento de uno de los discos más influyentes en la historia del rock alternativo, Psychocandy (1985), disco creado por los entonces debutantes The Jesus and Mary Chain que se posicionó inmediatamente como una nueva visión de la música punk. Una visión romántica, repleta de líricas nostálgicas y de guitarras increíblemente expresivas, pero también de un ruido ensordecedor.
El sistema de producción Wall of Sound de Phil Spector fue llevado a niveles inusitados por este cuarteto escocés en aquel disco. Impregnando un efecto reverb a todas las canciones que las hicieron prácticamente ininteligibles, una decisión creativa que terminó por fundar las bases de uno de los géneros más seguidos de los últimos años, el shoegaze de miradas en el suelo y melodías hermosas destruidas por el ruido de los instrumentos.
Ayer los hermanos Reid celebraron con un concierto muy especial en la Ciudad de México, como uno de los últimos agregados al marco del Festival Corona Capital, Jim salió al escenario luciendo su afilada figura, sosteniendo el micrófono con la elegancia que sólo pueden tener los iconos de cualquier sub-género del post-punk. Vestidos de negro iniciaron con la interpretación de dos de sus clásicos más reconocidos, ‘April Skies’ de Darklands (1987) y ‘Head On’ de Automatic (1989), misma con la cual se acrecentaron los ánimos de todos los presentes, coreando cada palabra del tema que después fue popularizado por Pixies en un espectacular cover de 1991.
Bajo un juego de luces espectacular que remataba a cada obscura sonoridad con destellos blancos finos y que combinó a la perfección con las máquinas de humo que trajo la banda, The Jesus and Mary Chain se entregó a su público con la interpretación de ‘Psychocandy’ y ‘Just Like Honey’. Lamentablemente los ingenieros de sonido decidieron apagar el micrófono de Jim cada que este tenía la intención de hablar, dirigirse a los mexicanos que esperaron más de cuatro años por su regreso o para introducir a sus músicos. No se le entendió nada y se le vio visiblemente molesto por esto.
Pese a todo, The Jesus and Mary Chain no decepcionó, pinto de negro al escenario principal del festival y ensordeció a los presentes con sus guitarras distorcionadas y elegancia pop.