Mi historia con Porter comienza en el 2004 cuando escuche por primera vez la voz aguda de Juan Son y la melancolía de un violín junto a ella, en ese instante supe que algo estaba pasando en la escena musical mexicana. Aunque la alineación de la banda es distinta ahora, después de 12 años, siguen sonando muy parecido pero definitivamente algo ha cambiado en la esencia.
Sólo fue una temporada la que me volaron la cabeza, el acudir doce años después de la primera vez al Teatro Metropólitan causó en mí una sensación de “caer por un espiral”, misma que sentía en ese entonces. David Velasco, vocalista de la banda desde 2013, tiene la virtud de refrescar las letras de cada uno de sus éxitos, antes su tono melancólico era envolvedor y te hacía salir de la realidad, ahora la vibra de David cambia por completo el sentido de las letras.
El evento comenzó con 424 que prendió a la audiencia con su rock costarricense, por lo que pasaron al rededor de 15 minutos para que Porter llegara al escenario que ya estaba a reventar, esperando para recordar viejos tiempos y crear nuevas memorias.
Comenzaron su repertorio con ‘Host Of A Ghost’ haciendo un recorrido musical y celebrando las bases que dieron origen a la banda; después comenzó ‘Cuervos’ y el publico ya estaba de pie brincando y coreando cada una de sus letras. La noche siguió con ‘Vaquero Galáctico’, ‘Espiral’, ‘Palapa’ entre muchos otros.
El público no paraba de corear las canciones que los han acompañado distintos momentos de sus vidas directa o indirectamente, ya que Porter ha sido una banda que marcó una gran etapa en el rock experimental nacional.
En todo momento Velasco habló de generar buena energía y es precisamente lo que se sintió anoche en el Teatro Metropólitan. A la mitad del concierto se cerraron los telones del escenario y a su regreso, con una bandera azul y flores amarillas, se abrió de nuevo para continuar con el concierto y muchas gargantas gritaran a la par de las percusiones de ‘Huitzil’ tema que se desprende el álbum Moctezuma (2015), creando una sensación de unión con el público. Siguieron deleitando a la audiencia con esa fuerza que los representa. Con un colorido final Porter se despidió de sus seguidores con buena vibra complaciendo a cada uno de sus fieles seguidores.