Hoy jueves la agrupación KONGOS estrenó el primer episodio de una serie documental que nos muestra a los cuatro integrantes tomando la carretera para promocionar su último disco de estudio Egomaniac (2016).
El audiovisual producido por la misma banda llegó bajo el título de Buss Call (2018) y muestra de la forma más sincera la vida de una agrupación de su categoría. Una banda internacional que tras varios éxitos ha logrado posicionar su estilo de rock-pop con ritmos dancehall en los escenarios más importantes del mundo, incluyendo highlights como “la presentación en el Festival Corona Capital de la Ciudad de México”, en palabras de su vocalista Daniel Kongos.
Es debido a este lanzamiento que platicamos con el líder de la banda respecto a cómo los afectó el haber tenido un éxito tan colosal como ‘Come With Me Now’, la forma en cómo están luchando para re-encontrarse artísticamente y no caer en la pose de lo comercial, hablamos también sobre lo que más les gusta hacer en el mundo… tocar en lugares desconocidos.
Su última canción ‘Everything Must Go’ está basada en la ansiedad que sintió Johny al darse cuenta de que la banda empezó a tomar la música como un negocio y no como formato de expresión artística…
Sin lugar a dudas hay elementos de eso. Desde mi perspectiva no hemos hecho algo solamente por el dinero, pero cuando tienes una canción tan exitosa como ‘Come With Me Now’ definitivamente empiezas a sentir una presión por repetirlo, el lanzar otro tema tan exitoso. Normalmente no funciona, que hayas tenido una cosa tan exitosa no significa que puedas repetir el resultado.
Así que sí, cambió un poco nuestro proceso. Además, el habernos unido a un sello tan grande y lidiar con todo lo publicitario ha sido muy demandante. Creo que hemos tenido éxito en mantener siempre nuestra expresión musical en primer plano, pero lo empresarial ha hecho que terminemos con relaciones y que terminemos siendo un poco infelices, sin posibilidad de hacer música.
Así que ahora están haciendo algunos cambios en sus vidas para enfocarse más en sus relaciones y en otros elementos importantes en su vida…
Sin lugar a dudas, nuestro principal objetivo en este momento es mantener un buen ambiente en el estudio. Es nuestra parte favorita del negocio, encerrarnos a trabajar en el estudio y tocar conciertos… no queremos que se afecten por otros elementos.
¿Cómo haces que el ambiente de su estudio sea divertido y relajado?
Creo que es una decisión mental, el dejar que las cosas fluyan y no preocuparnos por la comercialidad de la música, aunque amamos hacer música comercial, eso nunca ha sido un problema. Es más, el no ponernos restricciones, crisis o ambiciones específicas, si no tenemos aquello en mente, el ambiente se relaja mucho.
¿Alguna vez cambiaron una canción o un disco entero pensando en la comercialidad de la música?
Depende de las canciones, supongo. Si sentimos que un tema puede tener vialidad comercial, empezamos a pensar en la forma en cómo puede ser vendida, en hacerla más pegajosa. Aunque la idea no sea muy elaborada, le damos una consideración especial y creo que le hace bien a las canciones.
Aunque también hacemos canciones que no pueden ser tratadas como temas pop-rock, tienen ambiciones distintas a la comercialidad. En ellas nunca pensamos en hacerlas comerciales, nunca hay esas ambiciones en estos casos.
Es extraño, en la canción este tema parece muy difícil, que les ha causado mucha ansiedad. Sin embargo, me estás hablando muy libremente sobre el tema, ¿cuál es el problema principal de la comercialidad de la banda, por qué en la canción hablan de esto de una forma tan densa?
Creo que personalmente, el principal problema es cuando empiezas a proyectarte de forma distinta para obtener éxito comercial. Como cuando no estás siendo sincero, pero eso no tiene nada que ver con el resultado final.
Michael Jackson hizo varios de los discos más exitosos de la historia y si yo hubiera estado involucrado en alguno de esos productos sería de lo más feliz, porque me encanta la música. No estaría fingiendo, seguiría siendo genuino. El problema es cuando finges que te gusta algo, cuando lo fuerzas para vender.
¿Alguna vez has sentido eso, en el pasado?
Diría que he estado en ese precipicio, sí jaja.
Acaban de estrenar el primer episodio de su serie documental, ya está en YouTube. ¿Qué podemos aprender de Kongos al ver este documental?
Hemos esperado mucho para estrenarlo, aprenderán todo el ciclo que vivimos en el tour de finales del 2016 y principios del 2017. Sabrán un poco más sobre nuestras historias familiares, nuestras raíces y biografías.
Además, es sobre girar en general, es un buen documento para saber cómo es realmente el dar tantos conciertos, sin nada de glamour, todo es muy natural. Creo que es uno de los reflejos más sinceros de una banda en el viaje.
¿Qué es lo que más te gusta de girar?
Creo que lo más importante es el sentido de camarería que desarrollas con la gente que te acompaña. Sobre todo, si es el mismo grupo de gente el que te ayuda a lo largo de todo el viaje porque tienen que hacer todo juntos, tienen que gustarse y respetarse pese a todo. Es como en un circo, desarrollas relaciones muy cercanas y siempre tienes que traer esa mentalidad de llevarte bien con todos.
Podrías decirme cuál es tu recuerdo favorito respecto a este tour.
Hay muchos de ellos, probablemente diría que es el haber ido a lugares a los que nunca había pensado visitar. Rusia fue increíble, pero creo que el mejor show fue el Corona Capital en la Ciudad de México, fue una locura para nosotros. Creo que esos momentos, en los cuales te paras en un pequeño cuadro frente a miles de personas siempre son los mejores de la gira.
Todo en México fue asombroso porque nos sorprendió mucho que la gente se sabía nuestras canciones ahí, no lo esperábamos. Creo que ha sido la recepción más cálida que hemos tenido en un concierto hasta ahora, nos mostró lo que podíamos hacer.
Estamos esperando volver a México muy pronto, a principios del próximo año en un concierto en solitario, no a un festival.